"Esto sí es lo que esperábamos y no la playa de la que hablan. Esa se deja para los noveleros, lo que nos interesa es la escollera". Así reflexionaba ayer un veterano del pueblo marinero ante la colocación de los primeros prismas del que será el futuro dique semisumergido de San Andrés, la escollera tantas veces pedida para defender el frente marítimo de las avenidas desde el océano.

El pueblo ha elegido en este sentido la prioridad del dique frente a la playa artificial generada por los rellenos de arena. Una vecina explicaba que "la playa, de una u otra manera siempre ha estado ahí. La gente se ha bañado, se baña y se bañará en el muellito, pero lo importante está en las mareas. Y por eso estamos contentos".

La acción ha llegado con dos días de retraso, ya que estaba previsto su inicio para el pasado lunes, pero el mal estado del mar obligó a suspender el operativo. La mejoría de ayer propició la actuación de la gran grúa que había llegado la semana pasada a la isla.

En total serán 6.500 los bloques de hormigón -de siete toneladas de peso cada uno, 1,35 metros de alto, 1,55 de largo y 1,43 de fondo- que serán instalados para conformar la escollera. Los plazos apuntan a que los trabajos podrían estar culminados en octubre. La empresa encargada de llevar a cabo los trabajos con un plazo de ejecución de diez meses y un presupuesto de poco más de 3.157.000 euros es Sacyr Construcción, SAU.

Ayer mismo, el Ayuntamiento de Santa Cruz y la Autoridad Portuaria en el marco de una reunión conjunta celebrada en la Casa de los Dragos valoraban el inicio, al permitirlo la condiciones meteorológicas, de los trabajos para colocar los bloques de la defensa exterior del dique semisumergido.