"No sabía nada respecto a lo declarado hoy (ayer para el lector) por el concejal de Accesibilidad respecto a los 3.000 puntos negros en la ciudad. Nosotros tenemos los nuestros y por eso hemos reclamado por escrito ante la oficina del distrito Salud-La Salle una solución al problema que una persona discapacitada del barrio de La Cepsa nos vino a explicar personalmente el lunes pasado a la asociación". Así se expresó ayer Samuel García, vicepresidente de la AV Azorín, que el martes presentó en la sede municipal del parque La Granja una reclamación, acompañada de un anexo fotográfico, con los puntos detectados, varios espacios "inaccesibles" en su barrio donde, además, "hay un gran volumen de tráfico rodado" y, por lo tanto, "un riesgo para las personas de ser atropelladas".
"Además de advertir sobre las carencias y el mal estado del asfaltado y algunas infraestructuras, explica García, reclamamos la adaptación de las aceras a través del rebaje y las rampas para facilitar los movimientos a vecinos con discapacidad". Es necesario encontrar una solución en tres puntos concretos. Así los analizó García.
"En primer lugar -señaló- el recorrido de la calle Azorín hasta llegar al cruce con Muñoz Seca donde hay un escalón muy alto, incluso con el paso de peatones marcado. Llegando también a la trasversal con la calle Francisco Escolar, a continuación de Azorín, también están muy altos los perfiles de las aceras".
El segundo "punto negro" lo estableció García "en el recorrido de la calle Ramiro de Maeztu hasta la trasversal de Francisco Escolar, donde los bordillos de las aceras tampoco están adaptados".
Por último, el dirigente vecinal apuntó: "En el número 21 de la calle Azorín, delante mismo de la puerta del local social del bario, hay una plaza de parquin reservada a personas discapacitadas con el asfaltado en mal estado y el pintado totalmente desgastado por el paso de tiempo. Pedimos que se le dé un repaso. A esto y a todo".
Durante la visita a La Granja, García departió con la concejala del distrito, Yolanda Moliné, que, además de darle una cita para primeros de septiembre, prometió una próxima visita a la zona junto al edil de Accesibilidad, el también popular Carlos Correa.