El Cabo se siente "la cenicienta de los barrios". Asentamiento histórico de pescadores y cambuyoneros y vecino del cercano (y desaparecido) Los Llanos, El Cabo se mueve entre la modernidad y la tradición, entre lo antiguo y lo nuevo.

Así, las viviendas históricas se alternan con edificios modernos, de cristal, y los hijos de los primitivos pobladores se mezclan con los oficinistas.

La asociación de vecinos Los Caberos se queja de la depresión económica instalada en una vía principal del barrio, la calle Fernández Navarro. Muchos de los locales comerciales han cerrado. "Hemos pedido que pongan flores de temporada en las pocetas de los árboles, que adornen los árboles con luces cuando llega la Navidad, pero no hacen nada", se queja Juan Carlos Álamo, secretario de la citada asociación. "Hace ocho años estaban todos los locales abiertos", se lamenta.

En esta vía, las ramas de los árboles también tapan las farolas por lo que también han solicitado al consistorio que poden, porque se trata de una calle con poca luz. "No hay ni un cartel para indicar dónde está la Recova", manifiesta, a pesar de ser el barrio la unión entre una zona comercial como Tres de Mayo con su Intercambiador y otros lugares de interés turístico como es La Recova y el TEA.

Los residentes en El Cabo también quieren dinamización y por eso han solicitado que en la plaza que hay frente al IES Alcalde Bernabé Rodríguez "se ponga un mercado de artesanía, pero no solo los domingos". También una especie de templete o escenario pequeño donde puedan venir a tocar intérpretes o grupos. "Sería una plaza del Príncipe, pero en chiquitito".

La lista de peticiones es larga: una marquesina para la parada de guaguas de Miraflores; una solución para una fachada que se cae en Betencourt y Molina y que tiene condenadas cuatro plazas de parquin, o un solar infecto. Hay hasta un solar propiedad del ayuntamiento al que se le ha derrumbado parte de un muro. Se trata del lugar donde anteriormente estaba la patrulla canina de la Policía Local.

Angelita González, presidenta de Los Caberos, recuerda cuando el barrio eran todo casitas terreras y de pescadores y todavía estaban allí sus vecinos de Los Llanos. "Todos éramos familia, era cruzar la calle y allí estaban", recordó.

Ahora la zona ha cambiado y Los Llanos se ha convertido en una zona sin desarrollar completamente pero con viviendas nuevas y amplias. "Antes había unas casitas que hacían pescado frito, había una que la llamaban La Casa de la Madera", recuerda.

Ahora esos vecinos vuelven cada año por las fiestas de Nuestra Señora de Regla porque aunque viven en barrios diferentes sienten apego a sus raíces y sus vecinos. "Traen a los hijos y a los nietos y cuando el que era vecino se muere, pues son esos hijos y nietos los que siguen viniendo", explica Angelita González.

Desde el barrio, diversas asociaciones como la de Los Caberos siguen defendiendo ese espíritu de El Cabo como cambuyonero y apegado a las tradiciones isleñas.

Por eso, reivindican un poco más de amor y cuidado por esta zona donde el cementerio de San Rafael y San Roque no se termina de abrir y las calles más transitadas languidecen con sus comercios cerrados.

Nombre y situación

El Cabo es un barrio del distrito Salud-La Salle. Limita al norte con el barranco de Santos, del Puente de Serrador hasta su desembocadura; al este con la Dársena de Los Llanos; al sur el inicio de la avenida del Tres de Mayo; y al oeste la avenida de José Manuel Guimerá.

Población

El Ayuntamiento de Santa Cruz contabiliza, en su página web, que El Cabo tiene 694 habitantes, 335 hombres y 359 mujeres. Sin embargo, la asociación de vecinos Los Caberos sostiene que es el barrio más poblado del Distrito Salud-La Salle que, asimismo, es el distrito donde se concentra la mayor población del municipio.

Reseña histórica

Es uno de los barrios más antiguos de la ciudad. Data de finales del siglo XV, cuando los españoles desembarcaron en un lugar conocido como la Caleta de Negros, en el emplazamiento actual del Castillo Negro o de San Juan. Se ha considerado un pueblo de pescadores y cambuyoneros, como el de sus antiguos vecinos de Los Llanos, que con el tiempo han ido cambiando de actividad.

Servicios

Cuenta con numerosos edificios oficiales: Presidencia del Gobierno, Consejería de Educación... así como el Mercado Nuestra Señora de África y el Rastro los domingos.

Fiestas

El barrio de El Cabo celebra fiestas patronales en honor de San Telmo en la ermita del mismo nombre, aunque también se suma a las de Nuestra Señora de Regla de sus vecinos de Los Llanos.

Ramón Jorge Frías, ya fallecido, era el alma de El Cabo. El centro cultural del barrio lleva su nombre, aunque él falleció poco antes de verlo finalizado. Los que conocían a Frías lo describen como una persona generosa, que luchó por que el barrio tuviera todo lo que necesitara y por que las agrupaciones vecinales tuvieran un lugar donde realizar actividades. Cuatro años después de su fallecimiento, el edificio que lleva su nombre está aún sin inaugurar oficialmente y la placa con su nombre tapada detrás de la cortina. Sus vecinos y amigos, no obstante, tienen una fotografía en la entrada en recuerdo de un líder vecinal que aún permanece en la memoria de los que conocían.

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