El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, aseguró ayer que no tiene ninguna duda de que el año 2016 presenta unas perspectivas económicas favorables para la ciudad, dada la tendencia positiva que caracterizó a 2015.
Acompañado por representantes de los empresarios del turismo y del comercio, Bermúdez presentó un balance de la marcha económica del municipio marcado por "claros signos de recuperación", y destacó la "unidad" y el "diálogo" alcanzado con instituciones y comerciantes para impulsar el desarrollo de la ciudad.
Según los datos facilitados ayer por el consistorio, la capital cerró el año pasado con casi 100.000 contratos nuevos y una bajada del paro del 3,4%, hasta las 25.196 personas -la cifra más baja desde 2010-.
Por sectores, y según las previsiones de Fauca, el comercio, ocio y restauración creció un 4,8% -más de un 7% en Navidad-, lo que, a juicio del portavoz de la Federación, Abbas Moujir, representa un "termómetro" de la recuperación económica.
En el ámbito turístico, los alojados en la capital aumentaron más de un 11% en 2015 -más de 25.000-, con una ocupación media que ronda el 55% y unas 530.000 pernoctaciones (+8,9%). Es más, en Navidad, una temporada históricamente baja en la ciudad, la ocupación alcanzó el 78%, destacó el vicepresidente de Ashotel, Gabriel Wolgeschaffen.
En cuanto a los cruceristas, hasta el mes de octubre se había registrado un incremento del 25,07%, hasta superar los 452.000. En este sentido, José Rafael Díaz, director de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, destacó el aumento de más de 30 conexiones para el próximo verano, gracias, en gran medida, a la nueva estación de cruceros, que estará concluida en agosto.
Sobre la construcción, el edil de Urbanismo, Carlos Garcinuño, destacó que las licencias de obra aumentaron un 8,09% el año pasado, especialmente las mayores, que crecieron un 10,5%, hasta 963. Las menores se incrementaron un 7,1%, al pasar de 2.342 a 2.510.
En esa línea, destacó que la inversión "está a las puertas de la ciudad", y para beneficiarse de esta "oportunidad" abogó por desbloquear el planeamiento y dar seguridad jurídica.
Como objetivos para este año, el alcalde defendió la modernización de la administración, atraer empresas a la ciudad haciendo una labor "de comercial", dinamizar la ciudad para que sea "agradable" pasear por Santa Cruz de Tenerife, mantener la rebaja de impuestos, fomentar la inversión pública y "colaborar y cooperar" con el sector privado. "Seguiremos escuchando la opinión de todos los sectores para consensuar y sacar adelante los planes y programas que la ciudad necesita", dijo.
Según José Manuel Bermúdez, "las cosas van a un poco mejor". No obstante, advirtió de que hay muchas familias "que lo están pasando mal", por lo que hizo hincapié en el esfuerzo del ayuntamiento en destinar fondos a servicios sociales, además de en la necesidad de crear empleo.