David Carballo y Domingo Chávez, representantes de las asociaciones de vecinos Guacimara La Gallega y Unión de La Gallega, respectivamente, denunciaron ayer "el lamentable estado de la obra de drenaje de pluviales en la parte baja del barrio del Suroeste pese a que los trabajos fueron recepcionados el pasado jueves día 18 por las autoridades municipales e insulares. No entendemos cómo reciben una obra de tal envergadura sin comprobar y certificar que el acabado cumple con unos mínimos de seguridad".

"Concretamente -aseguran las fuentes-, la calle Cruz de La Gallega tiene la valla protectora (quita-miedo) completamente destrozada, con las piezas sueltas de sus pilares y sustentadas en varios tramos con simples vergas".

"Se puede observar -añaden- numerosos parches en el asfalto, porque no han sido capaces ni de reponer la señalización vial".

"También -indican los dirigentes vecinales- los pequeños remates en la acera dejan mucho que desear, ya que hay diversas tapas de telefonía y otro tipo de rejillas de telecomunicaciones que están enfondadas y mal rematadas".

Por otro lado, apuntan, "como la zona sigue en obras -se ejecuta en el cruce de las calles Cruz de la Gallega con Bigüipala la conexión de la red de drenaje de pluviales de la zona alta con la zona baja- han realizado un desvío provisional que no cumple con unos mínimos en cuanto a seguridad vial se refiere, ya que el carril de subida obliga a circular con medio vehículo en el asfalto y medio por la tierra, en plena curva y cambio de rasante, con unos simples conos sin anclaje para señalizar por donde hay que circular".

"Desde estos colectivos no entendemos las prisas de los políticos por certificar y recoger una obra sin comprobar que esté finalizada correctamente y sin contar con las entidades vecinales de la zona".