"Queremos el centro prometido hace ya ocho años en una parcela ubicada detrás del centro de salud y junto a la entrada de urgencias. Pero ahora no debería ser solo para mayores, sino para cualquier edad y perfil, ya que las circunstancias sociales han cambiado en el barrio". Así se manifestó un portavoz de la AV 8 de Marzo de Añaza para valorar la reunión que sostuvieron hace unos días representantes del colectivo con Isabel Mena, viceconsejera de Políticas Sociales del Gobierno de Canarias.

Desde 8 de Marzo plantearon en esa reciente cita "cuál es la situación actual del proyecto para la construcción del Centro de Día de Añaza". Recordaron la visita que hizo al barrio del Suroeste la entonces consejera Inés Rojas el 17 de abril de 2008, cuando se comprometió "a seguir avanzando en el campo de lo social". Rojas accedió "a impulsar la puesta en marcha del centro de día" para el que ya había parcela y dotación económica. Esperaba que las obras "comenzarán en breve". Además, garantizó el diálogo con Empleo para fomentar la formación de jóvenes de la zona con vistas a un nuevo centro comercial a abrir ese año. "Han pasado ya ocho desde entonces" apuntan.

"En la actualidad -añaden las fuentes-, la necesidad pasa por un centro polivalente en el que se pueda trabajar con todo tipo de edades. En especial con menores cuyas familias tengan dificultades para cubrir las necesidades educativas y de ocio de los pequeños".

Para el colectivo vecinal, "habría que empezaran a trabajar desde edades tempranas, ayudándoles a hacer sus tareas escolares, además de fomentar la autoestima con un componente lúdico. Atención personalizada y orientación".

La AV de Añaza contactará con el Ayuntamiento de Santa Cruz "para buscar información y rescatar el expediente. El Gobierno de Canarias ya no construye centros, pero sí los gestiona, nos dijeron. Una vez tengan la información, concretaríamos otra reunión".

Otro acuerdo fue "crear un plan especial de orientación e información para chicas jóvenes en un barrio con elevados índices elevados de natalidad y familias monoparentales. Cabría incluir un equipo psicopedagógico especializado". Sobre familias en exclusión social, se trató "la intervención con apoyo directo; el asesoramiento en posibles conflictos familiares y contratiempos que pudieran surgir en el hogar; la promoción y desarrollo comunitario, así como la atención integral a mujeres, jóvenes y mayores".

El objetivo, apuntan, debe ser que las familias no pierdan "su espíritu de seguir hacia delante". En palabras de Luis Celso García, el eterno presidente, "Añaza puede acabar siendo una fábrica de exclusión social porque los vecinos se vuelven vacíos cuando no tienen ninguna esperanza. Debemos dársela para el futuro".