El Ayuntamiento de Santa Cruz defendió ayer las tarifas aprobadas en mayo para las dos escuelas infantiles del municipio, Tara (Añaza) y Fayna (Ofra), tras las críticas vertidas por un grupo de padres, que han solicitado su derogación.

El consistorio remarcó que el 50% de las familias usuarias de las 140 plazas no pagan nada por el servicio. "Y del 50% restante, el pago medio mensual oscila entre los 44 y los 89 euros", detalló.

"Es necesario aclarar que se trata de rentas familiares de unos 1.600 euros al mes que, a cambio de 89 euros, reciben el servicio hasta las 17:00 horas, cinco días por semana. Incluye comedor, guarda y atención de los menores, y un sistema de apoyo y asesoramiento familiar para padres y madres en aspectos concernientes a la educación de los hijos", indicó.

Además, subrayó que tan solo siete de estas 140 plazas pagan el máximo previsto por la ordenanza, 298 euros al mes, y corresponde a unidades familiares con ingresos mensuales de 2.130 euros o superiores.

Remarcó el consistorio que "la regulación de los precios públicos que los usuarios de este servicio tendrían que afrontar en condiciones normales se realiza por imperativo legal, y todos los grupos políticos están de acuerdo en favorecer a las familias con menos recursos".

Según la ordenanza, además, la gratuidad se extiende para menores incursos en expedientes incoados por declaración de riesgo, y para unidades de convivencia con hijos de mujeres víctimas de violencia de género.