Hasta ahora se habían escuchado opiniones políticas y vecinales sobre la idea presentada por el Ayuntamiento de Santa Cruz para el futuro de la playa de Las Teresitas. Todas respetables, pero, tal vez, ninguna tan fundamentada desde el punto de vista técnico como la del expresidente del Colegio de Arquitectos de la provincia tinerfeña, Federico García Barba.

"Va siendo hora de pasar página en Las Teresitas; llevamos cincuenta años con esto", afirma el arquitecto tinerfeño, quien considera que es cuestión de "ponerse todos a favor para sacar algo", porque no puede ser que este asunto "esté así tantos años". "Ya es hora de que se finalice con algo tangible de verdad", enfatiza.

Al contrario que otras voces, García Barba estima que el Plan Especial de Las Teresitas presentado a finales de julio por el Ayuntamiento de Santa Cruz es "una buena opción" para mejorar la situación existente.

"En su desarrollo se pueden generar nuevos espacios para la práctica deportiva, se renovarán de una manera adecuada las infraestructuras de ocio y se dotarán de nuevos servicios necesarios para los usuarios de la playa, perfeccionando la accesibilidad privada y optimizando el transporte público", explica el expresidente del Colegio de Arquitectos de Santa Cruz de Tenerife.

"La experiencia peatonal junto a la orilla que se propone, con recorridos varios que forman una red intrincada de paseo, parece una idea interesante en sí misma que es muy diferente a la propuesta ganadora del concurso", precisa.

Y va más allá. En relación con la controvertida parcela hotelera, remarca García Barba que "al ser una propiedad municipal puede ser una fuente de recursos fundamental para acometer las obras de acondicionamiento y equipamiento colectivo que se proyectan en la playa; y que necesitan de una financiación que, a día de hoy, no existe y que no va a ser fácil obtener".

También se refiere a la urbanización del Valle de Las Huertas y a la supuesta privatización que se hará de la playa para los futuros residentes, denunciada por algunas voces críticas con el proyecto. "Cuando no hay argumentos serios se recurre a la confusión de cuestiones diversas", indica. "Algo que proviene de un problema legal en curso de resolución al estar cubierto todo ese espacio de sospechas de corruptelas varias", destaca el arquitecto.

Del mismo modo, se hacen afirmaciones infundadas, opina, sobre la privatización del acceso a la playa al obligar al abono en el aparcamiento. "Lo cierto es que para lograr una mayor superficie destinada a equipamientos deportivos y espacios ajardinados hay que buscar localización alternativa para algunas plazas de aparcamiento que deberán recolocarse necesariamente. Por ello, la ordenación funcional y paisajística presentada es válida porque se precisa tanto si se decide que estos servicios sean gratuitos como si son de pago", subraya.

En este sentido, sentencia: "A pesar de la negatividad ya volcada, es evidente que la ordenación presentada constituye una magnifica solución para este espacio de la ciudad tan castigado. Y el proceso para lograr que se ejecute, que tiene que hacerse todavía, no es fácil ni sencillo".

Y concluye: "Ha de aprobarse este Plan Especial que se acaba de presentar, realizarse el proyecto de urbanización correspondiente, debiendo ambos superar largos trámites administrativos, aportar los recursos necesarios para su realización y ejecutar las obras correspondientes. Con buena voluntad y apoyo suficiente, esto significa que el proceso que comienza ahora puede durar unos cuantos años todavía".

García Barba ha dejado constancia de sus opiniones en un artículo publicado en arquiscopio.com.