"Este es el solar de la discordia, origen del problema cada vez que llueve fuerte como el pasado día 6. Amesetado, en distintos niveles, el agua y otros materiales caen abruptamente al pasaje que conecta el Espacio Cultural El Tanque por la calle Álvaro Rodríguez López con el desde hace unos meses llamado Alfonso Soriano. La solución es vallar el descampado convertido hoy en aparcamiento". Lo asegura un portavoz de la Comunidad Los Dragos de Cabo-Llanos. Y añade: "Somos 240 pero esto afecta a miles de vecinos porque por ahí pasan a diario cientos de personas, sobre todo niños, y más en horario de tarde".

"Todo este entorno adolece -apunta- de falta de limpieza porque la última, en febrero, la llevó a cabo una cuadrilla del convenio con el Servicio Canario de Empleo (SCE) pero ha vuelto la suciedad y crecen las malas hierbas, sobre todo el rabo de gato".

Para estas fuentes, "el Gobierno de Canarias, propietario del solar, debe afrontar su responsabilidad. Sabemos que es así porque nos dirigimos al ayuntamiento -ya que las ordenanzas municipales dejan claro que hay que vallar los solares sin edificar-, que asegura no tener competencias porque el terreno -cerca de 8.000 metros cuadrados- no es suyo".

De hecho, "el pasado 29 de febrero, después de las lluvias torrenciales que originaron el arrastre de agua y diverso material, presentamos un escrito en la Consejería de Hacienda. Recogen la reclamación y reconocen que conforme al reglamento vigente el plazo máximo para contestar es de tres meses. Será que el día del registro de entrada solo existe cada cuatro años pero a fecha de hoy no hay respuesta".

Para estos vecinos de Cabo-Llanos se trata de "una anomalía urbanística y social sobre la que no solo no ofrecen solución sino que ni siquiera nos responden".