Es un presupuesto "engañoso y opaco", "socialmente insuficiente y derrochador", en el que se consignan más de 33 millones a sabiendas "de que no se podrán gastar". Con esos argumentos -entre otros- argumentaron ayer los concejales de Sí se Puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz, Pedro Fernández Arcila y Asun Frías, la enmienda a la totalidad que presentarán al proyecto de presupuestos para 2017.

Los ediles expusieron en rueda de prensa los detalles de su rechazo, y pidieron la reelaboración completa del proyecto de presupuesto municipal, que calificaron de "operación de márquetin político" para encubrir "publicidad engañosa".

Según indicó Arcila, el motor de las cuentas municipales para el próximo ejercicio "es la ocurrencia" porque el grupo de gobierno, CC y PP, "carece de estrategia de desarrollo para el municipio y no hay un norte claro".

Mientras, Asun Frías consideró que en los presupuestos se "impone" el modelo "caduco" de CC y PP y en los que se ignora la situación económica-financiera a la que a su juicio se ha visto abocado el municipio "por una pésima gestión" del grupo de gobierno, que se deriva en "constantes e innecesarios" incumplimientos de los principios de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera.

"Se está vendiendo un presupuesto que, de antemano, ya se sabe que no va a poder ejecutarse totalmente por el incumplimiento de la regla de gasto en 2015 y la obligación de cumplir los compromisos adquiridos de contención del gasto por el grupo de gobierno en el plan económico financiero aprobado para los dos años siguientes", remarcó Frías.

En opinión de ambos ediles, la consecuencia principal de la "mala planificación" presupuestaria "que se pretende ocultar" en el proyecto de presupuesto es que el ayuntamiento se ha comprometido con el Ministerio de Hacienda a mantener un nivel de gasto computable y concreto que en 2017 es de 190 millones.

Sin embargo, precisaron, en las cuentas del próximo ejercicio se han consignado 224,5 millones de euros, es decir que se presupuestan "de más" 33 millones que se sabe que no se van a gastar en cumplimiento del plan económico financiero.

En este sentido, los concejales de Sí se Puede criticaron que no se pueda utilizar para inversiones en la ciudad los 40 millones de euros del Remanente de Tesorería para gastos generales, "lo que causa un innegable perjuicio a la población y a los proveedores del consistorio".

También cuestionaron que se reduzcan "muy poco" los niveles de deuda financiera, "cuando gran parte podría liquidarse". "Se está privando al municipio de los beneficios que ello conllevaría, concertando, además, operaciones de endeudamiento que solo benefician a las entidades bancarias", precisaron.

Frías afirmó además que existe "la sensación" de que desde que José Manuel Bermúdez es alcalde de Santa Cruz ha aumentado "considerablemente" el gasto social, pero, sin embargo, el Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) tenía "más peso" en el presupuesto en 2011 -con Miguel Zerolo-, un 6,31%, que en 2017, un 5,75%.

Al respecto, los ediles de Sí se Puede proponen incluir una partida para promoción de vivienda de protección oficial, vender las propiedades del Patronato de la Candelaria y crear un patrimonio público de suelo, además de ayudas a la rehabilitación de inmuebles para familias con pocos recursos y aumentar la dotación para patrimonio histórico.

Arcila y Frías se refirieron también a la tendencia "privatizadora y multinacionalista" de CC y PP, por lo que exigieron la "remunicipalización" de los servicios de limpieza, se oponen a la "privatización" de los complejos deportivos y exigen que la rehabilitación de la montaña de Taco la asuman las empresas responsables "de su degradación" y no los recursos públicos.

Asimismo, criticaron la falta de apoyo al sector primario, al desarrollo de las energías sostenibles y al patrimonio histórico.

"Cumple los requisitos"

El concejal de Hacienda, Juan José Martínez, defendió ayer que el proyecto de presupuesto para 2017 no solo cumple con todos los requisitos técnicos del área de Hacienda, sino que el informe de Intervención es "claro": "cumple con las reglas fiscales de cumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria y de regla de gasto, estableciéndose un margen de aumento de gasto no financiero hasta el límite de la tasa de referencia, 32,7 millones".

El edil sostuvo que "tal vez" se hayan "liado" con las cifras, porque "lo que vale" es el informe del Interventor. "El que se ejecute o no dependerá ya de la capacidad de ejecución de los distintos servicios del ayuntamiento", detalló. "Pero no tiene ninguna restricción legal para que sea así", precisó. Es decir, que se "pueden gastar" los 246 millones presupuestados. "Y son unas cuentas que está en línea con los objetivos estratégicos del ayuntamiento: bajada de la presión fiscal, incremento de la inversión, mejora de los servicios sociales...

Aunque el plazo para presentar enmiendas al proyecto de presupuestos finalizaba el viernes 9, el grupo de gobierno decidió ampliarlo hasta hoy.