A pesar del anuncio realizado hace algunas semanas, el Organismo Autónomo de Fiestas (OAF) mantendrá la presencia de tres camellos en la tradicional cabalgata de Reyes, el próximo 5 de enero.

Así lo anunció ayer la concejal del área, Gladis de León, quien reconoció que habían descartado la idea tras las críticas recibidas el año pasado por la forma en la que descargaban y transportaban los camellos. Una forma que, por otra parte, es la habitual y no supone riesgo alguno para los animales.

De León justificó el cambio de postura en el "esfuerzo económico" realizado por los propietarios de los animales, que han cambiado para esta ocasión el método de transporte usado hasta ahora, de tal manera que los camellos no vendrán echados en el suelo, sino de pie en un camión con un sistema similar al que permite trasladar a los caballos.

"Quedan ajustados y no sufren ningún tipo de movimiento que pueda ocasionarles lesiones", indicó la concejal. "Cuando el propietario nos planteó esa solución, no había una razón para decir que no a los camellos", subrayó Gladis de León, quien remarcó también que para los dueños de estos animales esta época ofrece la posibilidad de obtener unos ingresos importantes que les permiten mantener a su ganado. "Cada vez hay menos, y a los niños les hace mucha ilusión", sostuvo.

De esta forma, y al igual que en 2015, los camellos estarán en el estadio Heliodoro Rodríguez López, a donde los Reyes llegarán tras al paso del helicóptero, y posteriormente seguirán el recorrido de la cabalgata portando los regalos de los niños. En ningún caso, detalló la edil, cargarán a los Reyes Magos, sino que estos volverán a desplazarse en carrozas.

"Nuestra idea es cuidar al máximo los animales", recalcó la concejal de Fiestas, quien, no obstante, indicó que si "este año" se produjera algún problema ya se analizaría la situación para el año que viene.