Funcionarios especialistas en patrimonio cultural e histórico del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Tenerife han constatado el abandono deliberado de edificaciones históricas por picaresca y especulación urbanística, y han advertido falta de medios para agilizar trámites en este ámbito.

Las afirmaciones fueron realizadas por Juan Carlos Hernández, jefe del Servicio de Patrimonio Cultural del Gobierno canario, y José Carlos Cabrera, jefe de la sección de Patrimonio Histórico del Cabildo de Tenerife, durante un debate organizado por la Asociación Nuestro Patrimonio de Santa Cruz de Tenerife.

Ambos han coincidido en señalar la falta de personal suficiente en las administraciones públicas para agilizar los trámites de licencias de obras, catalogaciones y planificación en esta materia, lo que, en general, hace que se alarguen en el tiempo estas gestiones para los ciudadanos, informa la Asociación Nuestro Patrimonio en un comunicado.

También ambos abogan por dar más incentivos y ayudas a los propietarios para aliviarles la carga que les supone conservar los inmuebles históricos, por lo que el Cabildo ya ha convocado subvenciones este año y el Ayuntamiento de la capital tinerfeña lo hará en los próximos meses.

Igualmente apuntaron que la figura del Bien de Interés Cultural (BIC) ha sido usada en exceso y hay inmuebles que pudieran no haber merecido este máximo grado de protección, pero mientras el funcionario del Gobierno abogó por cambiar el sistema legal de categorías legales y reducir el número de BIC, el del Cabildo apostó por abordar caso por caso y proteger en cada edificación los valores exteriores e interiores que merezcan preservarse.

Cabrera indicó que por los ajustes de personal en los últimos años en el Cabildo (que tiene seis técnicos en esta materia) tarda ahora más que en el pasado en tramitar licencias y consideró que "las administraciones públicas han fallado estrepitosamente" en no aplicar incentivos a los propietarios para conservar inmuebles históricos, algo que este año trata de paliar la corporación insular tinerfeña con 800.000 euros en ayudas para fachadas y cubiertas históricas.

El técnico insular subrayó que la obligación de su servicio público es "proteger el patrimonio cultural y que sea compatible con otros usos, pero no a costa de perder el patrimonio", en cuyo caso sus informes son negativos, por lo que recomienda a propietarios y arquitectos que, antes de hacer un proyecto, se asesoren en el Cabildo sobre lo que se puede o no hacer en un bien protegido.

El funcionario del Cabildo indicó también que en los cascos históricos de Canarias el número de edificaciones con valor patrimonial es inferior al que encontramos en el resto de España, debido a la práctica de los derribos y construcciones recientes sin ese valor.

José Carlos Hernández, jefe del Servicio de Patrimonio Cultural del Gobierno canario, reconoció que "a veces las administraciones públicas no han tenido la coordinación deseada" en patrimonio cultural, y que a esta área "no se la he dado la importancia que debiera" en los presupuestos públicos.

El jefe de servicio del Gobierno canario también puso de relieve que en las islas no capitalinas, aún hay menos recursos, y en la mayoría de administraciones solo hay un técnico en patrimonio histórico, y están desbordados.

La Asociación Nuestro Patrimonio recordó algunas de sus propuestas en este ámbito, como las de agilizar la concesión de licencias de obras y la tramitación de los planes especiales de protección de cascos históricos y la aplicación de un completo y potente sistema de ayudas e incentivos a los propietarios de inmuebles catalogados.

Respecto a la capital tinerfeña, pidió ampliar el catálogo de edificaciones protegidas ante la existencia de una gran disparidad de criterios entre el Cabildo, que ha propuesto desde 2007 dar protección a 500 construcciones más, y el Ayuntamiento, que solo catalogó 20 de ese listado, y varias decenas se han derribado desde entonces.