Una infraestructura de importancia estratégica e interés general. Así califica el estado la mejora y ampliación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) del barrio de Buenos Aires. Una inversión de 32,4 millones de euros, con partida ya incluida en los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE), permitirá el tratamiento y la depuración de todas las aguas que llegan allí procedentes de los municipios de Santa Cruz, La Laguna y El Rosario. Con un objetivo: el vertido cero al mar.
El Ministerio de Medio Ambiente publicaba en el BOE del pasado 15 de mayo un detallado informe sobre el estudio de impacto ambiental. A lo largo de 24 páginas, desgranaba las obras a realizar -no solo en la EDAR de Buenos Aires sino también en la Estación de Bombeo de Cabo Llanos (EBAR)- y emitía un análisis favorable del mencionado impacto.
La EDAR se ha quedado pequeña y la consecuencia es que se han venido vertiendo al mar cada año unos 8,5 millones de metros cúbicos de agua sin depurar.
La depuradora realiza actualmente un tratamiento de 25.000 metros cúbicos diarios de agua de los tres municipios, lo que representa casi el 60% de la cuenca. El resto se vierte al mar con un tratamiento "primario".
Santa Cruz cuenta con una autorización del Gobierno de Canarias para verter agua directamente al mar desde la EBAR de Cabo-Llanos hasta finales del año 2018 "bajo rigurosos criterios de control" y, según fuentes municipales, con "el firme compromiso es cumplirla".
El estado ha aceptado la financiación y se espera que antes de final de año la obra esté ya licitada. El gestor de la nueva depuradora será el Consejo Insular de Aguas del Cabildo.
Respecto a la hipotética subida del precio del agua en relación con el mantenimiento de la nueva instalación, los expertos consultados explican que "no se puede aventurar a tres años vista, cuando esté concluida en principio la mejora, lo que va a ocurrir. Es probable que suba la tarifa pero habrá que ver entonces si esa medida tiene justificación y base en la depuración. Plantearlo a día de hoy supone una mera elucubración".
Lo más trascendente en este momento es que la obra de la EDAR se licite antes de fin de año y se desarrolle a los largo de 2018 y 219 para llegar al objetivo con umbral en 202o: vertido cero al mar.