Desde la asociación de vecinos Guacimara-La Gallega denunciaron ayer "el lamentable estado de los cables de las telecomunicaciones en esta zona del distrito Suroeste".

Concretamente, según asegura el presidente del colectivo, David Carballo, y a la vez vocal del tagoror por Sí se Puede, "en la calle Altamira de nuestro barrio tenemos hace tiempo un poste de telefonía de los antiguos; es decir, de madera, a punto de partirse porque se está pudriendo y de provocar como consecuencia una desgracia si coge a alguien debajo en un lugar que suele ser bastante transitado".

Carballo incide en que "la revisión y mantenimiento de estos postes no existen ni en este punto concreto ni en ningún otro de la zona". Y añade que "las empresas de telecomunicaciones responsables de estas instalaciones, en vez de canalizar soterradamente los cables como deberían hacer, continúan extendiendo líneas aéreas, con el peligro, en primer lugar, además del impacto visual que implica".

Carballo Arrocha insiste en que "este no es un caso aislado, ni mucho menos, ya que en el distrito Suroeste son numerosos los postes de telefonía que se encuentran en mal estado".

El dirigente de Guacimara valora: "No entendemos cómo las administraciones permiten una práctica que es más propia del siglo pasado que del actua, cuando deberían poner los medios y canalizar adecuadamente, siempre bajo el suelo".

"Otro de los problemas que provocan este tipo de instalaciones aéreas, apostilla David Carballo, es que muchos vecinos -en nuestra opinión con toda la razón de mundo- se niegan a que los cables pasen por sus fachadas por lo que hay un gran número residentes en La Gallega que se quedan sin poder acceder a servicios cada vez más básicos como la fibra óptica o la telefonía fija".

El representante del colectivo vecinal apostilla: "En las imágenes (tomadas ayer) de la calle Altamira se pueden observar los cables descolgados al alcance de cualquier transeúnte y con el peligro de que con los vientos siempre habituales de la zona acaben por caer sobre alguna persona".

Carballo concluyó: "Lo que pedimos es que tanto por el riesgo que supone como por la estética soterren este lamentable cableado que forma parte de nuestro paisaje. Nos merecemos unas instalaciones más modernas y que garanticen la comunicación a los miles de personas que vivimos y trabajamos en La Gallega".