La asociación de vecinos Azorín criticó ayer el corte "sin avisar" del suministro de agua, que impidió ayer el normal desarrollo de las actividades que se realizan en el local en horario de mañana.

Fuentes del colectivo explicaron que la interrupción del suministro, según pudieron averiguar más tarde, se debe a un recibo de 234 euros fechado en marzo de 2017 y que el banco rechazó en junio al no haber suficiente dinero en la cuenta de la asociación.

No obstante, aclararon que la elevada cuantía no se debía a un gasto derivado de la actividad de la asociación, pues en ese momento ni siquiera tenían suministro en el local, sino a una fuga que se producía en uno de los jardines y que fue reparada hace meses.

Es más, técnicos de Emmasa ya habían detectado en dos ocasiones, primero en 2015 y luego en mayo del año pasado, un "consumo elevado" en el contador de la asociación de vecinos, que desde el colectivo aseguran que no se correspondía con su actividad.

Fuentes de la AV Azorín anunciaron ayer que presentarán una reclamación, aunque indicaron que pagarán el recibo para poder dar de alta de nuevo el contador.