El colectivo Queremos Movernos se quejó ayer de que el Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) ha dejado de atender a un niño con discapacidad al no tener el certificado que la acredita y que debe emitir el Gobierno de Canarias.

La petición de ayuda para el menor, que requiere un psicólogo, la recibieron los colectivos presentes en la Comisión Técnica de Discapacidad.

Según Queremos Movernos, los trámites para obtener el certificado que se le exige se prolongarían durante un año. "Y todo ese tiempo lo pagará caro", apunta el colectivo, que considera que hay que cambiar las bases que regulan las ayudas individuales, tal y como han solicitado al consistorio desde 2016, para que puedan contemplar determinadas particularidades.