Unas horas después de que concluyera su protesta frente al Ayuntamiento de la capital -13:30 horas-, los trabajadores de la empresa Elecnor, que hasta el pasado febrero se encargaba del mantenimiento de colegios y edificios públicos de Santa Cruz, recibieron ayer las cartas de traslado a Basauri (Vizcaya), alternativa que les ofrece la compañía tras no renovar el contrato con el consistorio.

En concreto, los empleados deberían viajar el día 2 de abril desde Tenerife, para empezar a trabajar un día después. Esa es la fecha que tienen los billetes que les ha reservado la compañía.

Según fuentes sindicales consultadas, los trabajadores firmaron ayer "no conforme" y se emplazaron a una última reunión con Elecnor el próximo lunes, de la que esperan que salga una solución definitiva, que podría ser el despido.

A juicio de estas fuentes, la compañía busca con esta medida -el traslado a la Península-, que los trece trabajadores han rechazado de plano, "echarlos sin pagar". "Si viajamos perdemos el derecho a la subrogación", aseguraron estas fuentes.

Precisamente, esta es la opción que persiguen los empleados y que el ayuntamiento ha anunciado que tratará de incluir, a través de una cláusula social, en el próximo contrato. Sin embargo, los pliegos aún están en elaboración, cuestión que los trabajadores critican al consistorio por no haber previsto la situación.

Los trabajadores lamentaron ayer, también, que nadie del equipo de gobierno se acercara para hablar con ellos durante las tres horas que duró la protesta a las puertas del edificio municipal. "Solo vinieron los representantes de Sí se Puede", dijo uno de ellos.

Cabe detallar que el concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, reconoció en la última comisión de control que la situación de los empleados de Elecnor era "indeseable", y lo atribuyó, por un lado, al rechazo a la prórroga del contrato por parte de la empresa -exigía mejoras económicas-, y, por otro, a la propuesta técnica que realizó el servicio, que no contemplaba las mismas condiciones económicas que tenían los trabajadores.

Con todo, expresó su voluntad de lograr la continuidad de los trabajadores en la compañía que resulte adjudicataria del nuevo contrato. "Esta circunstancia ya ha sido tenida en cuenta -dijo- para incluirla en los pliegos de licitación con una cláusula social de estabilidad laboral, a través de la figura de la subrogación, siempre que esta medida sea respaldada por los servicios jurídicos municipales".