Vecinos y ciudadanos que transitan por la zona de Villa Ascensión, concretamente por las calles Luis Segundo Román y Elgueta, Patricio Madán y Juan de Aguilar, se quejan de los problemas de accesibilidad, tráfico y riesgo vial que sufren quienes utilizan estas vías, ya sea como conductores o como peatones.

Según aseguran, estas reclamaciones ya han sido trasladadas a los responsables municipales desde hace años, pero parecen no encontrar una solución que aporte seguridad y tranquilidad a los ciudadanos.

Respecto a la calle Juan de Aguilar, las principales quejas se centran en la peligrosa ubicación del paso de peatones que cruza dicha vía a la altura de Luis Segundo Román y Elgueta.

El citado paso de cebra se encuentra en un tramo de curva de dicha vía, en cuyo sentido descendente, habitualmente, hay vehículos que circulan a altas velocidades sin que a nadie parezca importarle. Esta circunstancia y la escasa visibilidad de los peatones generan un riesgo que se incrementa debido a que es un paso de cebra muy utilizado por los alumnos y familiares de dos centros escolares próximos a esta vía.

Además, en las calles Luis Segundo Román y Elgueta y Patricio Madán, vías de un único sentido y con estacionamiento permitido en uno de sus márgenes, no se respetan las mínimas normas de estacionamiento y parada, puesto que es habitual que en los horarios de entrada y salida de un centro docente cercano, todas las aceras sean intransitables debido a los coches aparcados sobre las mismas. De hecho, los peatones, muchas veces también alumnos de este centro, deben caminar por la calzada con los riesgos que ello implica.

De igual manera, la congestión y atasco permanente en los horarios de entrada y salida del centro hace inviable la circulación de vehículos por esas calles, ni tan siquiera los de emergencia.

Para complicar más la situación, las estrechas aceras de estas vías están cercenadas en muchos puntos por la inadecuada instalación de farolas, postes eléctricos y de telefonía que hacen que muchos vecinos señalen, de manera irónica, que deberían optar al título de "Calle Más Inaccesible de Santa Cruz de Tenerife". Debido a esos obstáculos es imposible el paso por las aceras de una silla de ruedas, un carrito de bebé e incluso caminar normalmente.

En este sentido, los afectados solicitan al Ayuntamiento de la capital que "asuma sus responsabilidades y arregle dichas aceras" eliminando esos elementos, ensanchando la zona peatonal o la solución técnica que mejor se considere.

También reclaman la reubicación del paso de peatones de Juan de Aguilar e, incluso, una señalización específica (semáforo incluido si hiciera falta) puesto que cada día centenares de personas, muchos menores de edad, "se juegan la vida" cruzando en ese punto.

Además piden que la Policía Local controle la velocidad en Juan de Aguilar y haga cumplir la normativa de parada y estacionamiento en las calles Luis Segundo Román y Elgueta y Patricio Madán, donde residen decenas de familias.