Los más de 200 puestos del mercado Nuestra Señora de África de Santa Cruz de Tenerife se regirán por una nueva ordenanza municipal que pretende impulsar su despegue, y que dotará a la cooperativa de más autonomía, agilidad y modernización en sus servicios.

Con este objetivo la junta de gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha aprobado hoy la nueva normativa, que será sometida a aprobación inicial en el pleno del viernes y, tras el periodo de presentación de alegaciones, a su respaldo definitivo en otra sesión plenaria después del verano.

El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, señaló que esta ordenanza es "más acorde con los tiempos" puesto que la vigente data de 1989 y está "completamente obsoleta e inservible", indicó a su vez el concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga.

José Manuel Bermúdez indicó que la actualización de la normativa obedece a dos motivos, el adaptar la ordenanza a la regulación comunitaria y el de otorgar a los concesionarios del mercado integrados en la cooperativa mayor autonomía y flexibilidad a la hora de gestionar las instalaciones.

"Este reglamento permitirá el despegue del mercado aunando su actividad tradicional con su incorporación a servicios acordes a los nuevos tiempos", manifestó el edil Dámaso Arteaga, quien recordó que además de su función tradicional como mercado de abasto Nuestra Señora de África también organiza actos relacionados con el ocio.

La presidenta de la cooperativa del mercado Nuestra Señora de África, Estefanía Hernández, señaló que era necesario un nuevo reglamento para esta actividad, con 75 años de vida en la capital tinerfeña, y que ayudará a convivir a "un colectivo tan grande como el de los recoveros".

Al respecto José Manuel Bermúdez subrayó que el mercado es "auténtico, no un parque temático" y por ello los ciudadanos buscan en sus instalaciones algo original y diferente "y no más de lo mismo".

Estefanía Hernández explicó que en el mercado-por el que según el Ayuntamiento pueden pasar un millón de personas al año- no hay puestos vacantes puesto que por el contrario hay más personas interesadas en tener un local allí que los que se van o se jubilan.

Hernández confió en la que la nueva ordenanza ayudar a la agilidad en el funcionamiento porque un negocio "tiene que estar vivo o de lo contrario, muere rápido" y la burocracia no ayuda.

La nueva ordenanza adecua a su contenido a las nuevas disposiciones que incorpora la normativa comunitaria de libre acceso a las actividades de servicio para un mercado interior e incide en que se trata de un establecimiento público gestionado directa o indirectamente por el Ayuntamiento.

El consistorio establece la relación jurídica con los concesionarios sin que esto sea obstáculo para que pueda intervenir también en otros aspectos para garantizar una adecuada prestación del servicio público, tal y como se recoge en el régimen sancionador.

Entre las actividades que se contemplan se encuentran las del área de servicio de mercado, destinada al comercio minorista de artículos de consumo alimentario de abastecimiento, así como áreas de servicios e instalaciones comunes para garantizar su funcionamiento.

Además habrá zonas de apoyo para los envíos a domicilio, consignas, almacenaje y similares, gestión de servicios administrativos, técnicos, financieros, de información y similares.

Asimismo se prevé que haya áreas destinadas a actividades culturales, educativas, deportivas, de salud y bienestar social que contribuyan a la mejora de la oferta de servicios al consumidor.

También habrá zonas de servicios terciarios con restauración, hostelería u otros.

En todo caso, la superficie destinada a ejercicio de actividades de comercio minorista de artículos de consumo alimentario deberá ser como mínimo del 50 por ciento de la superficie total del mercado incluyendo, a efectos de este cómputo, su parte proporcional de instalaciones y zonas comunes del propio mercado.