El vertido de agua depurada que el pasado 25 de septiembre se produjo en el muelle de La Hondura, en la capital tinerfeña, "no afectó al medio ambiente", según el informe realizado por la Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz de Tenerife (Emmasa), informó hoy el Ayuntamiento.
La corporación municipal indica además en un comunicado que si el procedimiento informativo abierto por el incidente señalara que hubo una actuación deficiente, el consistorio incoará un expediente sancionador.
El cuarto teniente de alcalde y concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, puntualiza que el vertido fue de aguas depuradas y no de aguas fecales, y añade que los valores de los parámetros analizados tras el incidente en el medio receptor son de mejor calidad que cuando existen alivios por lluvias debido a escorrentías en la zona.
La incidencia de turbidez fue puntual y la empresa actuó de forma efectiva en la solución de la misma, señala el concejal, quien agrega que el vertido tuvo una duración total de 3 horas, se aisló inmediatamente el clarificador número 1 y se realizaron las maniobras de operación necesarias para restablecer el normal funcionamiento de la instalación.
Arteaga manifestó que desde Emmasa "se han dispuesto medios añadidos para controlar este tipo de incidencias, de las que hasta ahora no había antecedentes. Se cuenta con un sistema de medición y alarma en continuo de turbidez y también se han implantado nuevos mecanismos para realizar las acciones de aislado de los clarificadores".
El concejal advirtió de que la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) "es muy sensible a cualquier incidencia operativa, climatológica o de mantenimiento por su situación de estrés y sobrecarga de capacidad. Todos sabemos que la única solución posible pasa necesariamente por las obras de ampliación de la misma".
Y Arteaga recordó que la compañía "tiene abierto aún un expediente informativo y si el informe dictaminara que se produjo una actuación deficiente, se procederá a incoar el correspondiente expediente sancionador a la empresa".
Con tal fin, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha requerido a Emmasa, desde el pasado lunes, para que presente información complementaria a la que tienen los técnicos del consistorio.
"Desde hace muchos años hemos reclamado a todas las administraciones recordando que este no es un problema exclusivo de Santa Cruz, ya que a la depuradora llegan aguas de otros dos municipios y la capacidad ya era incluso corta cuando se construyó", señala el concejal.