El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, reclamó ayer al banco Santander que "dé instrucciones expresas a sus Servicios Jurídicos para que insten la suspensión" de cualquier alzamiento o desahucio referente a las 358 viviendas de Añaza, "evitando así aumentar la incertidumbre y la alarma social que ya se ha generado con este tema en las familias afectadas e impedir, además, que se provoquen situaciones de desamparo y exclusión social a personas que, en muchos casos, no disponen de recursos económicos".

El oficio enviado está justificado porque "no se ha recibido comunicación de los distintos órganos judiciales que están tramitando los diferentes procedimientos de desahucio y existiendo fechas señaladas de algunos lanzamientos", pidiendo además "la acumulación de los procedimientos en curso en un único órgano judicial".