Santa Cruz de Tenerife recordó ayer, en un sencillo pero emotivo acto, a los alcaldes pedáneos de Punta de Anaga Álvaro López Gil y Manuel Rodríguez Cruz, quienes darán nombre a un tramo de la carretera entre Chamorga y el camino de Roque Bermejo, y a la plaza del primer caserío, respectivamente.

El homenaje, a título póstumo, tuvo lugar en Chamorga y responde al acuerdo plenario adoptado por el ayuntamiento el pasado mes de julio. Al acto asistieron diversos representantes de la Corporación y de colectivos ciudadanos de Anaga, precisamente los impulsores del reconocimiento.

Durante una breve intervención, el alcalde, José Manuel Bermúdez, destacó la contribución fundamental de ambos para la mejora de las condiciones de vida de los vecinos y señaló que "hoy es un día muy especial para todos los habitantes del Macizo de Anaga, y, en particular, para los residentes de Punta de Anaga, porque estamos dando las gracias a dos personas que se desvivieron por los demás y consiguieron grandes cosas".

"Ellos fueron en vida un ejemplo para todos; y entre todos hoy les hacemos este homenaje, que nunca pagará lo que ellos dieron por estos pueblos, pero que, por lo menos, dejará sus nombres grabados para siempre en nuestra memoria", dijo.

El alcalde de la capital aseguró que "ustedes conocen mejor que nadie las dificultades que entraña la vida en los pueblos y caseríos de Anaga, lugares bendecidos por la naturaleza, pero en los que esa misma naturaleza hace complicado el día a día".