El Servicio Urbano de Titsa en Santa Cruz ganó durante el pasado ejercicio 2018 un total de 637.637 usuarios, lo que supone un incremento del 7,36% más con respecto a los números registrados durante 2017, rompiendo de esta manera la tendencia moderada de subida del 4% de media que se venía reflejando en años anteriores.

De esta forma, el año pasado 9.295.830 clientes optaron por subirse a una guagua del servicio público, mientras que durante el ejercicio anterior, 2017, los usuarios que apostaron por el servicio fueron 8.658.193, una diferencia de 637.637 usuarios "que viene a reflejar la apuesta por el transporte público impulsada por el Ayuntamiento de Santa Cruz", adelantó ayer el alcalde, José Manuel Bermúdez.

Destacó que "ese es el resultado de las políticas de apoyo al transporte público, transporte de Titsa que por un lado ha significado un incremento de recursos económico y acciones. Hemos invertido más dinero y hemos realizado un desarrollo y una apuesta por una reorganización lógica de las líneas de guaguas que permiten que sean más utilizadas por más gente".

No dudó en señalar que "son dos políticas que ponen el valor el transporte público urbano y que están dando sus frutos. Ese incremento de usuarios es una buena noticia. Con el nuevo contrato que hemos aprobado le damos viabilidad económica a Titsa para los próximos 4 años. Sus trabajadores pueden estar tranquilos respecto a la viabilidad de la empresa porque por lo que respecta al transporte urbano el ayuntamiento está detrás".

Bermúdez incidió en que dentro de las políticas que se están desarrollando está la renovación de la flota, "unas 75 en cuatro años. Creo que es una muy buena noticia que demuestra que la política que estamos aplicando es la eficaz y la correcta.

En esa misma línea, el concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, detalló que el incremento de usuarios se debe "a las medidas que hemos tomado en materia de mejora de frecuencias, ajustes y demás en el transporte urbano que han permitido que las líneas sean más fiables".

"Creemos que esa es la línea que hay que seguir y continuar, invirtiendo en el transporte público, en este caso, en el servicio urbano. Ahí está la inversión de 18,5 millones, que nos va a dar un salto cualitativo importante a la hora de fidelizar a los usuarios y ser un modo de transporte alternativo al vehículo. Ya no estamos hablando solo de carnet de estudiante, perfil de personas mayores y demás, sino también aquella persona que tiene vehículo y que para determinados trayectos lo deja en casa porque le sale mejor ir en transporte público urbano. Creo que es muy positiva la planificación y la programación", concluyó el responsable del transporte público chicharrero.