El Pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz aprobó ayer, de manera inicial, la nueva Ordenanza de Circulación y Movilidad de la capital. Lo hizo con los votos a favor del grupo de gobierno, CC y PP, y de Ciudadanos, mientras que el resto de partidos, PSOE, Sí se Puede e Izquierda Unida se abstuvieron.

La nueva normativa, que prohíbe y sanciona, entre otros aspectos, la mendicidad en la calle, la actividad de los "gorrillas" y la captación de clientes por parte de entidades con ánimo lucrativo en la vía pública sin autorización previa de ocupación, genera algunas dudas en la oposición, cuyos grupos anunciaron que presentarán alegaciones en el periodo de exposición pública. El más crítico fue Andrés Martín (PSOE), quien no consideró "adecuadas" prohibiciones como las citadas, y llegó incluso a decir que la Policía Local podría incurrir en un delito de prevaricación si se dedica a "recaudar" el dinero de los aparcacoches.

La concejal de Seguridad, Zaida González, dijo que es un "documento vivo".