El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, está convencido de que el pacto educativo "tarde o temprano es el camino para el país" porque la sociedad demanda "cierta estabilidad y coherencia". Por eso, desde su departamento se va a trabajar para desarrollar los ejes de consenso alcanzados de momento, al tiempo que se mantiene la "puerta abierta, si alguien más quiere incorporarse".
En su intervención en el Foro Cantabria, organizado por la Cadena Ser y Cantabria Campus Internacional, el titular de Educación ha reconocido que la "negativa" del PP a sumarse al acuerdo impide hablar de "pacto educativo", pero hay sin embargo un "pacto social" y con la comunidad educativa fruto de una reflexión y debate en el último año del que han salido doce objetivos en torno a los cuales hay un "gran consenso".
De hecho, ha resaltado que el Partido Popular, en su oposición al acuerdo, "más bien habla de lo que no está en el texto" que de lo que se recoge en él, lo cual, le hace pensar que hay un "consenso razonable" en torno a los objetivos.
"El pacto no es una foto con un cartel detrás y todos aplaudiendo. El pacto son mesas de trabajo con gente dispuesta a hablar y trabajando en la dirección de esos objetivos", ha comentado Gabilondo.
En este sentido, el ministro no se siente con las "manos atadas" por la falta de respaldo del PP y está "absolutamente dispuesto" a trabajar en llevar esos objetivos "lo más lejos posible", fijando las prioridades en las diferentes mesas de trabajo que se irán reuniendo a partir de este momento.
Por ello, anima a los ciudadanos a estar "tranquilos". "Vamos a trabajar muy seriamente por la educación y no la utilizaremos como arma arrojadiza", ha argumentado Gabilondo, quen asegura que la puerta está "abierta" a quienes quieran incorporarse.
El titular de Educación ha explicado que siempre ha creído en "el acuerdo y el consenso", pero señala que "quizá" hay quienes piensan que el consenso es aceptar "punto por punto" lo que ellos defienden, lo cual es "un acuerdo de uno consigo mismo". Y el acuerdo, a su juicio, es una demanda de la sociedad española, que confía en que siga reclamando el pacto "una y otra vez".
En su opinión, los ciudadanos "no quieren sobresaltos ni cambios efectistas en materia educativa", sino "cierta estabilidad y coherencia". "Es lo que todos están pidiendo", ha remarcado el ministro, quien aseguró que eso es lo que se tiene que ofrecer "cuando uno piensa en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones".
Gabilondo ha reconocido, no obstante, que ve "razonable" que los partidos piensen en ganar las elecciones, de lo cual es "firme defensor", y matiza que no prejuzga lo que piensan otros. "Supongo que también estarán pensando en las próximas generaciones", ha apuntado el ministro, quien se confesó "partidario de ganar elecciones, pero no a cualquier precio".