La actividad formativa de la XVIII edición de la Universidad de Verano de Adeje (UVA) arrancó ayer tras el espaldarazo mediático que supuso la conferencia inaugural del juez Baltasar Garzón. Esta cita con el conocimiento y la cultura alcanza su mayoría de edad en puertas del desembarco en sur de Tenerife de la Universidad de La Laguna (ULL), que prevé crear un campus en el municipio en el curso 2011-2012.
La ULL y el Ayuntamiento de Adeje han constituido una comisión mixta que estudia actualmente las titulaciones que ofrecerá el futuro campus. Aunque la decisión aún no está tomada -sí se sabe que serán uno o dos títulos de grado y otros tantos posgrados-, ambas instituciones se inclinan por potenciar la formación de los profesionales del turismo.
"Estamos decidiendo, pero a nadie se le escapa que el Sur está más dedicado al turismo que a otras cosas. A lo mejor sería interesante implantar algo relacionado con esto", apuntó ayer a este periódico la vicerrectora de Relaciones Universidad y Sociedad, Nélida Rancel, quien recordó que éste es uno de los sectores que precisa mayor formación y que ésta, además, es demandada por los empresarios.
Por su parte, el concejal de Educación y Cultura de Adeje, Epifanio Díaz, reveló que ayuntamiento y Universidad llevan "muchos años" trabajando en este proyecto, pero destacó que "el impulso final lo está dando el actual equipo de gobierno de la ULL, que es el que mayor implicación ha tenido". Díaz aclaró que "nunca ha habido dificultades", pero que ahora "hay más apoyo", y esa es la razón, explicó, por la que la iniciativa avanza con mayor rapidez. "Esto está en marcha y hay un compromiso que debe ser asumido por el siguiente grupo de gobierno de la Universidad", coincidió la vicerrectora, en referencia a las elecciones a rector, que se celebrarán el próximo año.
A juicio de la ULL y la corporación, la apertura del campus no tendría por qué afectar a la UVA. "Al contrario -asegura Epifanio Díaz-; la propia UVA será un complemento del campus y habrá mayor estabilidad en la relación con la Universidad".
Esta edición de la UVA representa, asimismo, "un punto y seguido" -en palabras del edil- hacia la nueva orientación que deberán tomar los cursos de extensión universitaria a causa de la implantación del Plan Bolonia.
La desaparición de los créditos de libre elección puede afectar a la captación de alumnado universitario, por lo que será necesario "ir más hacia cursos para profesionales, a través de las empresas y de los colegios profesionales, y ofrecer especialización y formación continuada", adelanta Rancel.
Ésta es también una de las demandas de los empresarios de la comarca. Sin embargo, Universidad y ayuntamiento son partidarios de "no perder de vista que los cursos deben continuar siendo interesantes para el alumnado".
En este sentido, Díaz argumentó: "éste es un encuentro que se celebra al final de curso académico y en el que los estudiantes pueden encontrar otro tipo de reflexiones, complementarias a lo que se imparte en el año. Esa es la parte atractiva: poder concentrar durante estas dos semanas a profesores de diferentes sectores, en algunos casos llegados de otros lugares, que puedan disertar sobre materias de actualidad e interés para los universitarios".
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