España soportará entre 3 y 6 grados más de temperatura máxima dentro de 60 años, concretamente para el periodo 2071-2100, respecto a los valores de referencia de 1961-1990.

Así lo ha informado hoy la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), al presentar las nuevas proyecciones regionalizadas de cambio climático, que señalan además una tendencia a la reducción de precipitaciones.

El informe, que ha sido presentado por la secretaria de Estado de Cambio Climático, Teresa Ribera, y el presidente de la Aemet, Ricardo García Herrera, indican que el incremento en la temperatura mínima será de entre 2 y 5 grados.

Para la España peninsular, el 90 por ciento de las proyecciones obtenidas muestran un incremento de la temperatura máxima para el periodo concreto 2071-2100 entre 3 y 6 grados de aumento.

En cuanto a las precipitaciones, las proyecciones muestran una mayor dispersión de datos, y aunque en la primera mitad de siglo no existe una tendencia significativa en la precipitación de la España peninsular, sí existe una tendencia a la reducción de la misma en la segunda mitad del siglo XXI.

El último decenio de siglo podría situarse probablemente en una horquilla del 15 al 30 por ciento respecto a la precipitación del periodo comprendido entre 1961-1990.

En España, según datos aportados por la Agencia de Meteorología, se ha producido un ligero calentamiento hasta finales de los años cuarenta y un ligero enfriamiento hasta el inicio de la década de los setenta.

A partir de 1980 se empieza a producir una tendencia al calentamiento que persiste hasta hoy.

En este informe, la Aemet actualiza los escenarios regionalizados mediante la utilización de datos procedentes de los modelos globales del IV Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) aprobado en Valencia en 2007.

Los escenarios constituyen estimaciones de los posibles rasgos futuros del clima y elaboran estudios de impactos y vulnerabilidad sobre aspectos ecológicos, económicos y sociales.

Para construir estos escenarios "hay que partir de modelos climáticos globales adaptados a las características propias de nuestro país", apunta Teresa Ribera.

La información presentada hoy esta disponible en la página Web de la Agencia Estatal y presenta gráficas que corresponden a la España peninsular y a las diecisiete Comunidades Autónomas a escala anual y estacional.

Este servicio esta basado principalmente en tres variables climáticas que son la temperatura máxima, la temperatura mínima y las precipitaciones pudiéndose elegir los resultados a nivel anual o estacional.

Para Ricardo García se podría "hablar de un descenso de un 20 por ciento en las precipitaciones a finales de siglo pero en general hasta 2050 no se observa una tendencia significativa en cuanto a menos lluvias."

Esto no significa, según afirma el presidente de la Aemet, "que vayamos a un clima desértico sino que nos adentramos en un clima con menos precipitaciones y mas temperaturas donde habrá más problemas para soportar el ciclo hidrológico actual".

En Madrid continúa, "se alcanzarán unos 7 grados más de temperatura máxima (en el peor de los casos) y un descenso de un 20 por ciento en las precipitaciones".

Ricardo García afirma que Madrid "alcanzará a finales de siglo las temperaturas actuales de Sevilla y Sevilla las temperaturas predominantes en la ciudad de Tucson, aunque esto no es irremediable si rebajamos las emisiones de gases contaminantes de CO2".