La espalda y las piernas concentran la mayoría de melanomas malignos detectados en las consultas de Dermatología, indicó hoy la Consejería de Sanidad, que recomienda evitar una exposición solar excesiva y acudir al médico si se observan cambios en el color, la forma y tamaño de lunares y manchas en la piel.

Explica la Consejería en un comunicado que el melanoma maligno se detecta con mayor frecuencia en zonas como la espalda (27 por ciento de los casos) y la pierna (un 17 por ciento), lugares que también se exponen a las radiaciones solares.

La edad media de los pacientes que padecen esta patología y han sido diagnosticados por los dermatólogos se sitúa entre los 53 y 58 años, siendo más frecuentes en mujeres (en torno al 60 por ciento de los casos).

Ricardo Fernández de Misa, dermatólogo e investigador del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, indica que la detección temprana y el diagnóstico de este tipo de patologías es vital para aplicar un tratamiento y así frenar la expansión y gravedad de los melanomas malignos.

Si estas lesiones invaden zonas más profundas de la piel, estos tumores pueden diseminarse y afectar a ganglios linfáticos y otros órganos, ponen en peligro la vida del paciente.

La mortalidad es prácticamente nula en aquellos casos muy precoces o in situ, de ahí la importancia de cuidar diariamente la piel, no exponerla a los rayos solares en exceso y sin protección y acudir al especialista si considera que algún lunar o peca ha sufrido alguna modificación evidente.

Los especialistas reconocen que en las últimas décadas la incidencia de los melanomas malignos ha aumentado en todo el mundo, y si bien en España en la actualidad no cuenta con estadísticas fidedignas respecto a su incidencia real, diferentes investigadores estiman que, aproximadamente, se llegan a detectar 7 casos nuevos al año por cada 100.000 habitantes.