El presidente de Amnistía Internacional en España, Esteban Beltrán, ha denunciado hoy la escasa presencia de los derechos humanos en la agenda política actual, y ha criticado que sean siempre los "sacrificados" en momentos de crisis, "como si sólo fueran artículos de lujo para épocas de prosperidad".

Así lo ha asegurado Beltrán tras participar en la maratón de acción "Cinco pasos por los derechos humanos", promovida por la ONG en 50 países y 55 ciudades españolas para recoger firmas y exigir que se respeten los derechos humanos de cinco personas y comunidades en riesgo de Gambia, China, Túnez, Guatemala y Rumanía.

Beltrán ha explicado que, teniendo en cuenta la actitud que han adoptado los gobiernos durante los últimos años, "no se puede confiar" en ellos a la hora de proteger los derechos humanos, sino que debe ser la sociedad civil la que consiga "cosas muy importantes".

La recogida de firmas ha comenzado hoy, coincidiendo con el 62 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en Madrid, pero continuará durante los próximos días en otras ciudades españolas, hasta el miércoles 15 que finalizará en Castellón.

Beltrán ha recordado que hoy, durante la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz, la silla de Liu Xiaobo -el ganador, que según Amnistía está condenado a once años de prisión por promover la democracia en China- estará vacía.

En este sentido, ha acusado a los jefes de los principales estados democráticos de haber "cedido ante el chantaje político y económico de China".

Los cinco casos de la maratón son: Norma Cruz, una defensora de los derechos humanos de Guatemala que se encuentra amenazada, Mao Hengfeng, una activista china que trabaja contra los desalojos forzados, Femi Peters, un opositor político en Gambia encarcelado por sus ideas, Saber Ragoubi, condenado a muerte en Túnez, y cien personas de etnia gitana desalojadas de su hogar en Rumanía.

Una vez recogidas las firmas, tanto en España como en el extranjero, Amnistía Internacional las presentarán ante las autoridades de los cinco países para exigir que se respeten y se protejan los derechos humanos de estas personas.