Los menores españoles, hasta el 27%, son los que más mienten en la Unión Europea (UE) sobre su edad en internet para poder acceder a contenidos restringidos para adultos, según una encuesta publicada ayer por la Comisión Europea (CE).

La consulta reconoce que "exagerar" la edad en internet es una "práctica común" entre los jóvenes para conseguir acceso a sitios restringidos, y aunque uno de cada seis menores europeos miente sobre sus años, donde más ocurre esta circunstancia es en España, Dinamarca, Irlanda y Chipre.

Paralelamente, los niños españoles son los que más creen (el 92%, sólo por detrás de los daneses) que en internet puede haber contenidos perjudiciales para ellos, y hasta el 14% afirma haberse sentido molesto alguna vez por este tipo de material.

Los españoles figuran entre los que menos perfiles públicos tienen en las redes sociales (el 14%), frente aproximadamente la mitad de los menores que los poseen en países como Hungría o Rumanía.

Los resultados del informe muestran que solamente un cuarto de los padres europeos controla (el 28%) o filtra (el 24%) lo que sus hijos hacen en la web.

El 70% de los progenitores dice hablar con sus hijos sobre su actividad en la red, y el 58% asegura que se sienta junto a ellos cuando navegan.

La Comisión también publicó ayer un estudio que alerta de que, aunque el 84% de los programas de software permite el control de ciertos contenidos en internet, resultan menos eficientes a la hora de filtrar los contenidos de la web 2.0, como pueden ser las redes sociales.

Añade que "solo algunos productos" en el mercado posibilitan filtrar contenidos en la web a través de teléfonos móviles o consolas de videojuegos, dispositivos que uno de cada cuatro menores en Europa emplea para navegar en internet.

En concreto, el estudio analizó 26 herramientas de control para ordenadores personales, tres para consolas de videojuegos y dos para teléfonos móviles.

El resultado del informe mostró que el software existente "filtra bien" los contenidos para adultos, aunque todavía existe al menos un 20% de posibilidades de que los sitios con material inapropiado para los niños burlen ese control, especialmente aquellos que promueven comportamientos como la anorexia, el suicidio o las autolesiones.

A su vez, también pueden quedar bloqueadas páginas cuyo contenido sí que es específicamente para niños, observó el Ejecutivo comunitario.

En ese contexto, únicamente unas cuantas herramientas permiten filtrar contenidos web 2.0, como redes sociales, foros o blogs, o bloquear mensajes instantáneos y chats y depurar listas de contactos.

Los informes elaborados a instancias de la Comisión Europea también señalaron que el inglés es la lengua más común en las herramientas de control, y que la elección de otros idiomas es "limitada".

Mediante la publicación de estos informes, la Comisión pretende aumentar la concienciación sobre la importancia de proteger a los menores de algunos contenidos que pueden encontrarse en internet, y proporcionar a los padres "un punto de vista objetivo sobre qué software de control parental es más eficaz".