La Agencia de Seguridad Nuclear de Japón elevó hoy la gravedad del accidente de Fukushima desde el nivel 4 hasta el 5 en la Escala Internacional Nuclear y de Sucesos Radiológicos (INES, por su siglas en inglés), de entre 0 y 7.

Según la televisión nacional NHK, la agencia ya ha informado de esta revisión al Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA), cuyo director, Yukiya Amano, llegó hoy a Japón para recabar información de primera mano sobre la situación en Fukushima.

El nivel 5 se refiere a los accidentes nucleares "con consecuencias de mayor alcance", mientras el grado 4, en el que lo mantenía hasta ahora, definía a los accidentes "con consecuencias de alcance local".

El nivel 7, el más alto en la escala de medición de los sucesos nucleares (accidentes graves), corresponde a la liberación al exterior de materiales radiactivos con amplios efectos en la salud y el medio ambiente, y requiere la aplicación prolongada de contramedidas.

El de la central de Chernóbil, en Ucrania, en 1986 es el único caso hasta el momento en el mundo de accidente grave de máximo nivel.

El seísmo del día 11 y el posterior tsunami en el nordeste de Japón dañaron el sistema de refrigeración de la central, que sufre problemas en sus seis reactores de agua en ebullición.

Desde ayer, jueves, el personal de emergencia de la planta se esfuerza, con la ayuda de equipos militares y de bomberos, de enfriar el reactor 3 con vertidos de agua desde camiones cisterna y helicópteros.

La radiactividad en torno a la central nuclear, operativa desde 1971, llevó al Gobierno nipón a evacuar casi 230.000 personas en un radio de 20 kilómetros y recomendar a aquellas entre 20 y 30 kilómetros que permanezcan en sus casas con puertas y ventanas cerradas.