Galaxias como la Vía Láctea y Andrómeda, así como nebulosas, cúmulos estelares y planetas se pueden fotografiar con una simple cámara y un trípode, ha dicho en una entrevista el astrofotógrafo Daniel López, quien tiene como "filosofía" en su trabajo que la noche no es en blanco y negro, y puede ser más impresionante que el día, llena de luz, color y magia.

También se puede fotografiar con una simple cámara y un trípode la Luz Zodiacal, un fenómeno que se produce cuando la luz del Sol ilumina los débiles restos de la nube que dio origen al sistema solar y que sólo se puede observar en lugares con un cielo muy bueno y sin contaminación lumínica como el de Canarias.

La Luz Zodiacal se ve como una especie de triángulo luminoso y blanquecino con base en el horizonte y uno de sus extremos apuntando al cielo, comentó Daniel López.

Este astrofotógrafo que nació en Huelva hace 34 años insistió en que la noche es incluso más impresionante que el día para fotografiar, sólo que hay que dedicarle más tiempo para obtener las imágenes.

Daniel López, que se dedica en exclusiva a la astrofotografía desde hace año y medio es la única persona que ha publicado en la NASA en los cuatro formatos que se utilizan, y que son con cámara y trípode, con telescopio de aficionado, con telescopio profesional y con vídeo (hecho con fotografías).

Su último trabajo es un vídeo del cielo de Canarias en el que presta "muchísima" atención a los fenómenos atmosféricos, astronómicos y ópticos, y en el que se ven halos dobles y triples de la Luna, un arco iris doble, nubes estacionarias y el rayo verde del Sol, entre otros.

Daniel López ha dedicado a este trabajo un año, durante el que ha tratado de captar las peculiaridades atmosféricas, astronómicas y ópticas del cielo de Canarias, que muestra en su web www.elcielodecanarias.com.

El último trabajo también ha sido publicado por la NASA además de por diversos blogs científicos, lo que llevó a que esas imágenes fueran visitadas en un sólo día por más de 140.000 personas.

Comentó que para cualquier persona es una satisfacción que sus imágenes sean publicadas por la NASA y señaló que en los últimos tres años es algo que le ha ocurrido en doce ocasiones.

Para hacer el trabajo es preciso pasar muchas horas para realizar fotografías en blanco y negro, y que reciben el color de los filtros rojo, verde y azul que se colocan en las cámaras.

La astrofotografía no se estudia, recordó Daniel López, quien se dedica a esta actividad después de trabajar durante cuatro años en el Instituto de Astrofísica de Canarias como Técnico de Operaciones Telescópicas, rastreando basura espacial y operador del láser del telescopio OGS.

Daniel López siempre ha sido un aficionado a la fotografía y a la astronomía y cuando terminó en el instituto de Paterna del Campo, en Huelva, se trasladó a Tenerife para estudiar en la Facultad de Física de la Universidad de La Laguna, pero le pareció que eran unos estudios demasiado teóricos.

Por ello regresó a Huelva, donde estudió Ingeniería Técnica Industrial, Automatismos, a la vez que enviaba el currículo cada vez que salía en el IAC una plaza que le interesaba, hasta que hace seis años logró una como Técnico de Operaciones Telescópicas, momento en el que comenzó a trabajar con telescopios profesionales y a utilizar en ellos las técnicas de tratamiento de imágenes que usaba en telescopios de aficionado.

En el IAC Daniel López comenzó a apuntar a objetos lejanos en el cielo con el telescopio IAC-80 y durante la entrevista comentó que para hacer fotografías con ese tipo de instrumentos se precisa como mínimo una noche entera y varios días calibrándola y procesándola.

Pues hay que trabajar con tiempos de exposición elevados para captar imágenes de objetos que están muy lejos y son muy débiles, indicó Daniel López, quien agregó que un telescopio es como un embudo gigante que recoge fotones.

Para conseguir instantáneas de esos objetos con un telescopio profesional hay que recoger su luz durante una o varias horas con un filtro rojo, el mismo tiempo con el filtro verde y lo mismo con el azul, y seguir el movimiento de este a este durante toda la noche.

Explicó Daniel López que la imagen más profunda que se conoce del Universo la recogió el telescopio espacial Hubble con exposiciones tomadas durante diez días consecutivos en la región de la Osa Mayor, donde se creía que no había nada y en la que "aparecieron" miles de galaxias.