Los investigadores españoles han dado un paso al frente en la medicina personalizada al demostrar cómo una terapia dirigida contra el cáncer de pulmón duplica la supervivencia libre de progresión de este tumor frente a la quimioterapia, en aquellos pacientes con una mutación genética específica.

El presidente del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), Rafael Rosell, ha presentado en la reunión de la Asociación Americana de Oncología Clínica (ASCO) los datos del EURTAC, un estudio en el que han participado casi medio centenar de hospitales de este país y algunos centros de Francia e Italia.

Este ensayo en fase III, el primero de estas características realizado en población occidental, ha desvelado que el fármaco oral erlotinib en pacientes con mutación en el gen EGFR reduce un 63% el riesgo de que su enfermedad vuelva a progresar, ha precisado Rosell en declaraciones a Efe.

Concretamente, los datos muestran que con esta terapia los afectados alcanzan una supervivencia media sin que el tumor empeore de 9,7 meses frente a los 5,2 de la quimioterapia y sin los problemas de toxicidad que ésta conlleva.

El doctor Luis Paz-Ares, también coordinador de esta investigación y jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, ha puntualizado que las mutaciones del EGFR son más frecuentes en pacientes con adenocarcinoma, en mujeres y en no fumadores, y están presentes en un 10-26% de los carcinomas pulmonares.

Desde febrero de 2007 y hasta el pasado mes de enero, los autores de este estudio analizaron de forma centralizada en el Instituto Catalán de Oncología (ICO), ubicado en Badalona, un total de 1.275 pacientes de los cuales se identificó que 174 -de los que 116 eran españoles- presentaban la mutación.

A continuación fueron distribuidos aleatoriamente a recibir o bien la terapia erlotinib o bien quimioterapia basada en platino como tratamiento de primera línea.

Paz-Ares ha confesado que la indagación se interrumpió antes de lo previsto al comprobarse en un análisis intermedio que ya se había conseguido el objetivo primario, es decir, que los pacientes vivan más tiempo sin que la dolencia avance en comparación con la quimioterapia y sin sufrir sus efectos secundarios.

"Esperemos que esta investigación sirva para que las autoridades europeas y estadounidenses aprueben el uso de erlotinib en primera línea para pacientes con esta mutación", ha aventurado el presidente del GECP en la cumbre mundial más relevante sobre oncología.

Paz-Ares ha esgrimido que el EURTAC es la demostración de que se puede investigar la medicina personalizada en una dolencia de tan mal pronóstico como el cáncer de pulmón avanzado, al tiempo que refuerza la importancia de poder tratar un tumor según su genotipo.

"Lo idóneo sería disponer de fármacos igual de efectivos para todos los subgrupos porque de ese modo estaríamos dando más pasos hacia la cronificación de la enfermedad", ha enfatizado.

Bartomeu Masutti, secretario del GECP y uno de los investigadores del ensayo, ha aclarado que aunque el dato fundamental es la mejora de la supervivencia libre de progresión, "es igualmente destacable lo que supone para estos enfermos recibir un fármaco con muchos menos problemas de toxicidad". De hecho, entre los que son tratados con quimioterapia los abandonos son más del doble.

Los expertos han coincidido en que la magnitud del beneficio que aporta la terapia dirigida en pacientes mutados pone aún más de relieve la necesidad de hacer una prueba a todos los que a priori podrían portar la mutación del EGFR en su tumor.

"En Estados Unidos, el test se está haciendo al 30% de los afectados a los que debería hacerse; en Europa estamos bastante mejor: los datos estiman que al menos se le realiza al 60%", ha apostillado.

El doctor Paz-Ares ha informado de que al menos una veintena de centros españoles hacen la prueba de manera rutinaria, si bien ha apostado por consensuar su realización tal como están tratando de promover algunas iniciativas en marcha.