La Asociación Española contra el Cáncer (AECC) ha exigido hoy a los responsables sanitarios del nuevo Gobierno que los recortes económicos "no afecten, ni en dotación presupuestaria ni en calidad, a los servicios y prestaciones de los pacientes oncológicos y sus familias".

En una nota de prensa, la AECC ha insistido a los responsables sanitarios que, pese a la coyuntura de crisis que atraviesa España, "el cáncer debe seguir siendo una prioridad absoluta en su agenda".

A su juicio, es necesario que se optimice la gestión para utilizar los recursos de manera eficiente.

Para ello, la Asociación ha pedido un "compromiso vinculante", tanto del Gobierno central como de los responsables autonómicos, que garantice que no se va a producir un retroceso, al menos, en "tres áreas críticas".

Estas áreas son: los programas de cribado poblacional de cáncer colorrectal y los tiempos de espera para diagnóstico y tratamiento que, ha explicado en la nota, deben tenerse en cuenta considerando los estándares de práctica clínica y las características de cada tumor y caso individual.

El tercer área, es la atención al paciente al final de su vida con la implantación de Unidades de Atención Multidisciplinares, tanto hospitalarias como domiciliarias, en todas las comunidades autónomas.

En opinión de la AECC hay que "seguir trabajando por la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud, pero siempre teniendo en mente que la prioridad es la protección de los más vulnerables".

Además, la AECC recuerda que, según su OncoBarómetro, casi el 80% de los españoles ha tenido una experiencia muy cercana con el cáncer y que el 67% lo considera un problema de salud grave y el 30% muy grave.

Estos datos significan, ha agregado, que el cáncer es el problema de salud más grave para los españoles por encima del resto de las enfermedades, además de ser la primera causa de muerte prematura en el mundo (en España es la primera en hombres y la segunda en mujeres).

Por último, la Asociación recuerda que actualmente existen en España 1.500.000 personas afectadas por la enfermedad y que cada año se diagnostican unos 200.000 nuevos casos.