Científicos de varias instituciones españolas analizan más de 300 kilos de muestras de grandes cráteres en Mauritania para determinar si proceden del impacto de un colosal meteorito hace unos 20.000 años lo que, si se comprueba, haría reescribir la historia geológica del noroeste de África.

Así lo indica el geólogo-paleontólogo Francisco García-Talavera, coordinador de este proyecto en el desierto del Sahara y el Adrar mauritano que lidera el Organismo Autónomo de Museos y Centros del Cabildo de Tenerife, del que fue presidente y ahora es asesor emérito.

Los expertos han viajado en varias ocasiones a Mauritania para estudiar los cráteres de Tenoumer, Aouelloul y Richat.

García-Talavera, que ha sido profesor de Geología y Paleontología en la Universidad de La Laguna durante veinte años, señala que este proyecto "apasionante" necesita más expediciones y dataciones pero los primeros resultados de los análisis de las muestras apuntan a que estos enormes cráteres fueron causados por el impacto de un asteroide.

Esta hipótesis es contraria a la postura de otros científicos que argumentan que el origen de estos cráteres es endógeno, es decir que se trata de un domo: una masa rocosa que se eleva y abomba el terreno hasta llegar a la superficie y luego se va erosionando hasta producir una forma concéntrica.