La ola de frío siberiano que azota Europa desde el pasado fin de semana ha causado en las últimas 24 horas al menos siete nuevas muertes en la parte central y sureste del continente, informaron hoy las autoridades de los países afectados.

En Rumanía, cuatro personas murieron congeladas y se eleva el número total a 28 fallecidos, informó el ministerio de Sanidad en un comunicado emitido en Bucarest.

Las fuertes nevadas registradas entre ayer y hoy han obligado a cortar numerosas vías de tránsito en el país balcánico.

En este momento permanecen cortadas 14 carreteras nacionales, según informaciones del Ministerio de Transportes, mientras que decenas de trenes han sido anulados a causa de la nieve.

Más de 300 personas sin techo fueron trasladadas a centros sociales por los servicios de urgencia en las ultimas 24 horas, según Sanidad, mientras que unas 150 personas necesitaron asistencia medica por su exposición a las temperaturas extremas.

Las autoridades meteorológicas han emitido el código amarillo por nieves, vigente al menos hasta mañana, al tiempo que se mantiene la alerta por frío, con temperaturas mínimas de 14 grados bajo cero.

En la vecina Hungría, ya son seis las personas que han muerto a causa del frío, con la más reciente víctima registrada en la localidad de Székesfehérvár, al suroeste de Budapest, donde una anciana murió congelada en la calle.

El Servicio de Meteorología de Hungría ha declarado el estado de alerta roja en nueve provincias del sur y este del país, el naranja en tres otras y amarillo en las restantes siete.

Se espera que en el sureste del país las nevadas se intensifiquen en las próximas horas y se pronostica una capa de nieve de hasta medio metro de altura, algo inusual en las llanuras húngaras.

Los pronósticos prevén nevadas hasta el lunes en la gran parte del territorio del país y para la próxima semana unos mínimos de hasta 22 grados bajo cero.

Los ayuntamientos han abierto ante las personas sin techo varios inmuebles sin uso y albergues nocturnos con calefacción.

En Austria, las autoridades informaron hoy de un hombre de 66 años, que falleció congelado en la calle, al caerse de camino hacia su vehículo.

Con esta muerte, ya son tres las personas que han fallecido en la república alpina, donde las temperaturas polares han alcanzado mínimas de hasta 28 grados bajo cero.

En la ciudad de Salzburgo, en el oeste de Austria, ha estado fuera de servicio temporalmente la principal planta de calefacción a distancia, lo que ha dejado a unos 10.000 hogares sin calefacción y agua caliente, aunque ya ha vuelto a funcionar.

En Montenegro, una persona ha muerto a causa del frío polar que también azota a este pequeño país mediterráneo, mientras que en Serbia sigue el estado de emergencia de 27 municipios debido a grandes cantidades de nieve y las bajas temperaturas.

En las últimas 24 horas, las autoridades locales lograron salvadas de la congelación a 23 personas cuya vida corría peligro por estar bloqueados en la nieve.

En Croacia, la situación más difícil se registra en la franja litoral del mar Adriático, Dalmacia, donde hoy ha sido proclamado el estado de emergencia, con hasta dos metros de nieve y fuertes vientos de hasta 200 kilómetros por hora.