Casarse por el rito anglicano en Inglaterra será un 40 % más caro a partir del año que viene, mientras que los funerales se encarecerán en más de un 50 %, según las nuevas tarifas aprobadas hoy.

El Sínodo General de la Iglesia de Inglaterra, formado por 467 obispos y clérigos reunidos estos días en Londres, decidió subir el precio de las bodas de 296 libras (350 euros) a 415 (500 euros), y el de los funerales de 102 libras (120 euros) a 160 (190 euros).

Estas tarifas incluirán por primera vez los gastos administrativos y de iluminación, pero se quedarán fuera otros costes como la calefacción, los sacristanes o los organistas que serán opcionales y se cobrarán por separado.

La junta eclesiástica anglicana, que en 2010 aprobó una subida del 4 % en el precio de las bodas, ya debatió el año pasado la posibilidad de aumentar en un 50 % los costes de los matrimonios y los funerales.

Algunos miembros del sínodo se mostraron disconformes con esta decisión y alertaron del peligro de que muchas parejas con pocos ingresos puedan dar la espalda a la institución al no poder permitirse las nuevas tarifas.

"Este encarecimiento es difícil de justificar en tiempos de austeridad. La Iglesia anglicana no debería dificultar a los pobres el acceso a estos servicios, cuando una ceremonia sencilla cuesta 100 libras (120 euros) en el registro civil", protestó el reverendo Simon Killwick de Manchester (norte de Inglaterra).

En cambio, John Packer, el obispo de Ripon y Leeds (norte de Inglaterra) aseguró que las nuevas tarifas reflejan la "realidad" de los costes por lo que espera que las parejas entiendan la subida.

La decisión también servirá para homogeneizar la diferencia de precios en las 16.000 iglesias de Inglaterra que creaba "confusión" entre los ciudadanos.