Los resultados del experimento que cuestionó la Teoría de la Relatividad de Einstein pudieron deberse a una serie de problemas técnicos en los aparatos según los cuales los neutrinos, una partícula subatómica, viajan más rápido que la luz.

Según explicaron ayer los responsables del experimento Opera en el Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN), una mala conexión de un cable de fibra óptica y la errónea sincronización entre dos cronómetros explicarían los resultados que sorprendieron a los científicos.

La revista "Science" adelantó el miércoles a través de su página web, citando fuentes del experimento, la posibilidad de que diferentes problemas técnicos hubiesen influido en los resultados que concluyeron que los neutrinos viajan más rápido que la luz.

El cuestionado experimento consistió en lanzar haces de esta partícula subatómica a través de la tierra desde el CERN, en Ginebra, hasta el laboratorio italiano de Gran Sasso, ubicado a 730 kilómetros de distancia, con el que se obtuvo en repetidas ocasiones una conclusión sorprendente: los neutrinos llegaban 60 nanosegundos antes que la luz.

Los resultados ponían en entredicho la Teoría de la Relatividad de Einstein, que establece que no existe nada que pueda viajar más rápido que la luz.

"La única manera de poder conocer la verdad es rehacer los experimentos enviando nuevos haces de neutrinos desde el CERN", afirmó ayer el portavoz del centro, James Gilles.