La Fundación Instituto de Trastornos Alimentarios (FITA) ha puesto en marcha, junto a la Sociedad Protectora de Animales de Mataró (SPAM), una prueba piloto en la que aprovechan la capacidad terapéutica de los perros para ayudar a jóvenes que padecen algún transtorno alimentario.

La iniciativa ha nacido después de que FITA haya aprovechado el proyecto social de la SPAM, "Vincles", que utiliza las capacidades de los perros acogidos en sus refugios para ayudar a colectivos de personas o colectivos que presentan discapacidades o problemas de integración social, informan los promotores de la iniciativa.

Un día a la semana, técnicos en terapias asistidas de la SPAM se desplazan al centro que ITA tiene Cabrils (Barcelona) acompañados de cuatro perros y, durante una hora y media, los pacientes aprenden las técnicas de adiestramiento y realizan sesiones de entrenamiento con los perros.

Actualmente, una decena de jóvenes participan de este programa que consta de doce sesiones.

La responsable de proyectos sociales de FITA, Sílvia Navarro, ha destacado que esta actividad tiene beneficios tanto para los pacientes como para los propios animales, ya que la interacción entre ellos favorece la creación de unos vínculos y la mejora de algunas actitudes personales.

"Es una buena oportunidad de ayudar a los jóvenes a nivel terapéutico para fomentar la autoestima", ha afirmado Navarro, quién ha manifestado que "los chicos y chicas trabajan en equipo, fomentan la empatía, mejoran las relaciones sociales...".

Además, gracias al adiestramiento los perros pueden tener más opciones de ser adoptados por una familia al conseguir una conducta que facilita la convivencia en un hogar.

Según Navarrro, la previsión es que el programa finalice en abril. Además, al final del proyecto los jóvenes y los perros harán una exhibición donde demostrarán todo lo aprendido. Si tiene éxito, la iniciativa se volverá a repetir.

FITA es una entidad sin ánimo de lucro fundada en 2002 para la prevención, la formación, la investigación y la creación de nuevos recursos sociales para personas con Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).

Esta entidad está vinculada ITA (Instituto de Trastornos Alimentarios), red asistencial creada en 1998 para dar una respuesta global a las necesidades de estos enfermos, no únicamente en el ámbito médico sino también psicosocial, con programas pioneros en España.