Japón registró casi 600 terremotos de magnitud superior a 5 grados en la escala abierta de Richter desde el seísmo de 9 grados que asoló hace casi un año el noreste del país el pasado 11 de marzo, informó hoy la Agencia Meteorológica nipona.

A pocos días de que se cumpla el primer aniversario de la tragedia, la agencia especificó que el archipiélago sufrió desde entonces 97 réplicas de más de 6 grados Richter y 6 superiores a los 7 grados.

A parte del gran terremoto, el 11 de marzo de 2011 se registraron también 158 réplicas de más de 5 grados, una magnitud cercana a la del terremoto que sacudió en mayo de 2011 el municipio murciano de Lorca (España), y que causó nueve muertos, centenares de heridos y miles de damnificados.

La agencia también detalló que el último sismo importante se produjo el 1 de marzo en la costa de Ibaraki, al norte de Tokio, donde hubo un temblor de 5,3 grados.

A pesar de que se han ido reduciendo las réplicas, la agencia recomienda que se mantenga la precaución ante un eventual terremoto, ya que se están produciendo réplicas de 5 grados en otras áreas del norte del país como Niigata y Akita.

No obstante, la Agencia Meteorológica nipona reiteró que las posibilidades de que en Japón se originen réplicas mayores de 7 grados son cada día menores.

El terremoto de 9 grados ocurrido en el noreste del país provocó un tsunami que arrasó la costa con olas de hasta quince metros, lo que causó cerca de 20.000 muertos y 470.000 evacuados.

Además, el mar golpeó con fuerza la central de Fukushima Daiichi lo que desató la peor crisis nuclear desde la de Chernobil en 1986 y afectó gravemente a la agricultura, la ganadería y la pesca local.

Japón se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, por lo que está relativamente acostumbrado a temblores que, en su mayoría, no tienen consecuencias graves por las estrictas normas de construcción en vigor y la rigurosa preparación de su población.