El Consejo Superior de la Salud de Bélgica desaconseja la natación para los bebés menores de un año por los riesgos que plantea para su salud, según se desprende de un informe adelantado hoy por el diario "Le Soir".

El organismo oficial, que es consultado por las autoridades públicas del país en todo lo relacionado con la salud, ha llegado a esa conclusión tras las investigaciones de una docena de expertos.

"Los expertos han medido riesgos y ventajas. Para los menores de 12 meses, no hay beneficios reales (...). Por contra, son particularmente vulnerables, más sujetos a infecciones, con mucosas muy reactivas y pulmones inmaduros", ha explicado la directora del estudio, Micheline Kirsch-Volders, en una entrevista con "Le Soir".

Kirsch-Volvers ha recordado además que en las instalaciones en las que se practica la natación con bebés las temperaturas de agua y aire son elevadas, lo que aumentan la presencia de microorganismos.

La experta asegura que las ventajas que plantea la piscina para los bebés más jóvenes -físicas y afectivas- pueden obtenerse con un simple baño.

Según "Le Soir", alrededor de un 15 % de los niños belgas practica la natación con menos de un año, una técnica que comenzó a extenderse en la década de los años 60 del siglo pasado para acostumbrar a los pequeños al agua y mejorar su coordinación.

El Consejo Superior de la Salud sí recomienda, sin embargo, la natación para los niños de más de un año y no ha dado credibilidad a los estudios de un investigador belga, que asegura que el cloro multiplica las posibilidades de sufrir asma en el futuro.