La Comisión Europea (CE) tiene previsto proponer a mediados de 2013 cambios en la normativa comunitaria para combatir el despilfarro anual en la UE de cerca de 89 millones de toneladas de productos alimenticio en buen estado.

El comisario europeo de Sanidad y Consumo, John Dalli, explicó hoy en la comisión de Agricultura del Parlamento Europeo que el desperdicio de comida es un problema que preocupa a Bruselas, ya que en la Unión se desaprovechan cada año 180 kilos de alimentos por persona, con el enorme impacto económico y ambiental que ello conlleva.

El asunto se trató en el marco de un debate sobre política alimentaria y bienestar animal en el que el eurodiputado socialista italiano Salvatore Caronna pidió a la CE que estudie la designación de 2014 como "año de la lucha contra el despilfarro alimentario".

Dalli indicó que el problema se podría resolver con medidas "sencillas" que permitan saber al consumidor cuándo termina la vida útil del producto, como por ejemplo la inclusión de dos fechas en el etiquetado de los alimentos.

De esa manera, una fecha diría "utilizar preferiblemente antes de" y la otra "utilizar como máximo hasta", señaló el comisario, quien se mostró convencido de que la medida permitiría un importante ahorro.

Dalli subrayó, asimismo, que hace falta "mejorar la concienciación" entre los ciudadanos para combatir este problema.

Se estima que casi la mitad de los alimentos en buenas condiciones presentes en los hogares y supermercados de la UE se desperdicia cada año, mientras 16 millones de personas dependen de las instituciones de beneficencia para alimentarse.

Por su parte, un reciente estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) indica que europeos y norteamericanos despilfarran entre 95 y 115 kilos de alimentos al año por habitante, mientras que en África subsahariana la cifra se sitúa entre los 6 y los 11 kilos.

Desde 1974, el despilfarro de alimentos en el mundo se ha duplicado.