Las investigaciones contra el cáncer lideradas por el bioquímico y oncólogo español Mariano Barbacid, encaminadas a descubrir fármacos diana que permitan un tratamiento más personalizado de los tumores, le hacen afirmar que se está "en los albores" de un cambio en las terapias contra esta enfermedad.

"Existen más de 400 genes mutados y sólo tenemos 20 fármacos selectivos para tratarlos", ha explicado Barbacid en declaraciones en Badajoz, donde ha pronunciado una conferencia sobre cómo desde 1998 el tratamiento contra las dianas moleculares está cambiando la manera de abordar la lucha contra el cáncer.

Según ha precisado, los agentes citotóxicos de los tratamientos químicos están siendo paulatinamente sustituidos por otros más tolerables, pero aún así, el 80 por ciento de los fármacos recetados por oncólogos sigue siendo todavía de los antiguos, más agresivos y menos selectivos a la hora de bloquear las proteínas mutadas.

En este sentido, ha detallado que el cáncer se produce por una acumulación de mutaciones en células que empiezan a crecer desordenadamente y ha incidido en la diferencia que existe entre unos cánceres y otros, ya que la índice de supervivencia en el de testículo, por ejemplo, es el más elevado, frente al de páncreas, que es el que más muertes provoca, por delante del de cerebro.

Así, ha señalado que el cáncer no se puede prevenir, sino tratar tempranamente, ya que está ligado a un envejecimiento celular que no se puede anticipar, y es justamente este declive el que provoca que cada vez existan más casos de cáncer, y no tanto factores exógenos al cuerpo humano como la alimentación, aunque sí ayudan a acelerarlo, como lo hace claramente el tabaco.

Respecto a las terapias selectivas contra el cáncer, Barbacid ha recordado que la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó el año pasado tres fármacos que han permitido el aumento de la supervivencia en cáncer de tiroides, melanoma metastásico y adenocarcinoma de pulmón, cuyos enfermos afectados en el gen Alk verán salvadas sus vidas, aunque este tipo de cáncer tenga una incidencia de tan solo el 4 por ciento de la población.

Asimismo, ha indicado que desde que se descubrió el oncogén que provoca el adenocarcinoma de pulmón hasta que se ha logrado el fármaco diana han pasado tan solo cuatro años, un tiempo que según Barbacid no es lo normal, ya que la media se sitúa alrededor de diez o doce años.