Un matrimonio en paro de Gran Canaria ha puesto en marcha un sorteo como original forma de tratar de evitar el desahucio de su vivienda, recaudando fondos para afrontar los impagos acumulados de su hipoteca mediante la venta de boletos de la rifa de un ordenador en persona y a través de una web.

Ayudaasalvarmicasa.com es la página de internet desde la que cualquier interesado en responder a la "llamada de solidaridad" que, en última instancia, ha motivado esta iniciativa, puede adquirir uno de los 30.000 boletos que, al precio de 5 euros cada uno e impresos con información explícita sobre la causa que se busca financiar, han puesto en venta sus promotores, Nazareth Martín y Carlos Passos.

Pareja que, según ha explicado el marido, tenía empleo cuando hace 8 años suscribió una hipoteca de 133.000 euros para comprar su casa de Vecindario, en el municipio de Santa Lucía de Tirajana, por la que pagaba cuotas mensuales de entre 550 y 600 euros, pero se vio en problemas cuando, hace más de dos años, en otoño de 2011, ambos perdieron sus puestos de trabajo.

Empleada ella en una empresa del sector de la construcción que la despidió y él en una de páginas de internet que cerró por quiebra, empezaron hace un año a no abonar las cuotas por falta de recursos, lo que, unido a la suma de los intereses que, a razón de 30 euros diarios, añade a su deuda la entidad que les dio el crédito, les ha llevado a las puertas del desahucio, ha dicho.

Precisan que, en la actualidad, solo les separa de ese desahucio un juicio que tienen pendiente de celebración, tras acudir a esa vía y rechazar la propuesta que les hizo su banco, Banesto, de eludirla y subastar directamente su casa por consejo de su abogado.

Esto les ha dado, al menos, un tiempo más de plazo para poder buscar soluciones a su situación, y eso es lo que han decidido tratar de hacer promoviendo su sorteo.

Así lo explican en su web, donde, tras reconocer que se exponen a salir de su vivienda por no poder pagar su hipoteca "como miles de personas en toda España", señalan: "Hemos decidido, en lugar de realizar una manifestación o sentarnos a esperar desamparados a que nos echen de nuestra casa, realizar una acción social a gran escala".

Acción con la que aspiran a lograr "seguir teniendo un techo donde vivir y una cama donde dormir", mediante la ayuda de personas anónimas a las que piden colaborar con su causa "con muy poco esfuerzo y realizando una acción solidaria", según subrayan.

Y agregan que, a cambio y por "tan solo 5 euros" cada boleto, tendrán oportunidad de ganar el premio del sorteo, consistente, según se precisa, en un ordenador "de último modelo completo" cuya marca y tipo se detallan en las bases "o, en su defecto, la cantidad de 2.500 euros", el precio de mercado del mismo.

Los boletos, puestos a la venta este mes de junio, podrán comprarse hasta el 28 de febrero de 2013, días antes de que se decida el ganador, que será aquel cuyo número se corresponda con el del premio del sorteo ordinario de la Organización Nacional de Ciegos de España del 1 de marzo.

Con la venta de sus boletos, y sumando de 5 en 5 euros, esperan Carlos y Nazareth afrontar su deuda con el banco, que cifran en la actualidad en más de 135.000 euros.

Cantidad que superarían de agotar todos los números del sorteo, con lo que recaudarían 150.000 euros.

Carlos Passos, que se ha mostrado confiado en lograr su objetivo porque la suya es, según ha subrayado, "una idea original, que no se ha hecho nunca antes en España porque lo único que sí se ha hecho es que alguien ha subastado su propia casa por no poderla pagar, pero no hacer un sorteo para intentar conservar la casa", ha admitido, en todo caso, que el ritmo de ventas, por ahora, no es el que esperaba.

Ya que, tras casi dos semanas de salir a la calle a diario para intentar convencer a la gente de que compre algún boleto y de lanzar su mensaje de socorro por internet, las ventas a través de la red ascienden a tres -"dos chicas de Lanzarote y un chico de Tenerife"-, y las realizadas en persona "no llegan a 300", pese a contar con la ayuda de familiares y amigos que también les ayudan.

Este esposo expuesto al desahucio ha asegurado, en todo caso, que "no pierde la esperanza", en especial por el hecho de que, aunque hay gente que les pone "excusas sin sentido" para no comprarles, como "abogados que dicen que primero tienen que averiguar si el sorteo es legal", hay otras personas que sí se han sensibilizado con su causa, "en especial las más humildes", según ha recalcado.