El agua y la energía, recursos interdependientes cuyo consumo va en aumento en el planeta, requieren políticas globales de ahorro y sostenibilidad para conseguir ser más eficientes, han opinado expertos consultados por EFEverde con motivo de la celebración del Día Mundial del Agua.

Un informe de la ONU presentado con motivo de la conmemoración del Día del Agua, consagrado este año a la unión de ambos recursos, advierte de que en 2050 el consumo del líquido elemento aumentará un 44 % para satisfacer las demandas industriales y de la población, mientras que el consumo energético subirá un 50 %.

Para Sergio de Otto, secretario del Patronato de la Fundación Renovables, la interrelación entre agua y energía es tal que "sólo cuando esté solucionado el problema energético se solucionará el problema del agua".

De Otto ha señalado que las energías renovables han probado históricamente su capacidad de solucionar problemas relacionados con el agua y que además "representan en sí mismas" las políticas necesarias en el ámbito hídrico: "ahorro y sostenibilidad".

El desarrollo de "medidas concretas de impulso de las renovables como tecnologías de apoyo en la gestión del agua podría solventar problemas" relacionados con este recurso fundamental, ha dicho.

"El principal problema es que no hay una política energética que defina con una visión global lo que supone ese vínculo con el agua", ha criticado el experto en energías verdes.

El director de la Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES) y miembro del Consejo Asesor del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento del Gobierno de España, Víctor Viñuales, ha asegurado que "para que la relación entre agua y energía sea más eficiente, son indispensables cinco cambios en la sociedad".

En un acto de la Fundación We Are Water en Barcelona, Viñuales ha explicado que es necesario "la integración de las políticas, vencer la empatía de corta distancia, maximizar la eficiencia energética en vez de la producción del trabajo, potenciar la economía compartida y mejorar la gobernanza en las crisis".

Antolín Aldonza, director general de la Asociación Española de Empresas de Tecnología del Agua (Asagua), ha recalcado que España ha sido siempre una "potencia mundial" en gestión del agua, gracias a sus eficientes sistemas de gobernanza basados en el trabajo de las confederaciones hidrográficas".

Pese a ser un modelo de gestión del "exportado" al exterior, Aldonza ha apuntado que España necesita un esfuerzo en inversión en este ámbito, "próximo a los 12.000 millones de euros", para "desarrollar infraestructuras" y trabajar en I?.

El director de Asagua ha indicado asimismo que España aún tiene trabajo por hacer en planificación hidrológica, infraestructuras y gestión de costes del agua para cumplir con la Directiva Marco de Agua de la Unión Europea.

Aldonza ha denunciado que en España "se tiene la mentalidad de que el agua no cuesta nada, en parte porque está subvencionada y los ciudadanos no pagan lo que cuesta".

"En el ciclo integral del agua, que incluye el abastecimiento de agua potable, el saneamiento y la depuración, mil litros de agua suponen un gasto energético de tres kilovatios, de los que dos kilovatios se consumen para que el agua llegue al grifo de las casas", ha detallado Aldonza.

A su juicio, es necesario concienciar al ciudadano para que entienda que "el ahorro de agua significa ahorro de energía y una contribución al medioambiente".

Con motivo de esta celebración, en el último Consejo de Ministros se aprobó una declaración en la que el Gobierno manifiesta su compromiso a "seguir prestando atención al agua en todas sus esferas y en toda su problemática", desde un enfoque basado en los derechos humanos y teniendo en cuenta su vínculo directo con la energía.