Un conductor ha acumulado 40.000 euros en multas al usar el coche de su hermano muerto, lo que le ha permitido burlar 200 denuncias y seguir al volante pese a haber perdido todos los puntos del permiso de conducir, han informado hoy los Mossos d''Esquadra.

El conductor es un hombre de 60 años, vecino de Alcover (Tarragona), que tiene más de 200 denuncias administrativas de tráfico por exceso de velocidad y por no pagar los peajes de la autopista; había perdido todos los puntos del carné y lo tenía caducado desde el 2007.

Según las fuentes, el Servicio Catalán de Tráfico (SCT) alertó a los Mossos de Esquadra de irregularidades en la tramitación de expedientes a la hora de comunicar las sanciones de tráfico a un vehículo, cuyo titular era un hombre que constaba como muerto desde 2012.

Los Mossos comprobaron, mediante la matrícula, que el 10 de febrero de 2012 en Lleida y el 19 de noviembre de 2013 en Vilafranca del Penedés (Barcelona) habían parado ese coche y habían imputado al conductor por un delito contra la seguridad del tráfico.

Identificado el posible conductor, montaron un dispositivo policial el pasado 23 de julio en Alcover, donde estaba domiciliado el coche, y, el día 24, una dotación de paisano lo localizó aparcado en el centro de la localidad.

La patrulla constató que un hombre y una mujer subían al coche y se dirigían hasta la Rambla Nova de Tarragona y, tras identificar al conductor y corroborar que tenía el carné caducado y sin puntos, le imputó un delito contra la seguridad del tráfico

Hasta que no se haga el cambio de nombre del titular del vehículo éste está inmovilizado en las dependencias policiales de Tarragona.