Alemania, Brasil, Inglaterra, Australia, Suiza... hay muchas alternativas para elegir. Una vez se ha seleccionado el destino a emigrar, hay que abordar la búsqueda de empleo de una manera sistemática y con metodología. Es decir, establecer un plan de búsqueda.

Es necesario adaptar el currículum y la carta de presentación. El país marcará la forma en la que se presenta la candidatura. El modelo de currículo varía de un país a otro, y no sólo en el idioma. En los países miembros de la Comunidad Europea, es preferible utilizar el modelo normalizado de CV Europeo. En http://europass.cedefop.europa.eu hay información y plantillas. También es preferible preparar el CV y la carta en el idioma oficial del país porque mostrará al reclutador la capacidad lingüística. Si no se tiene nivel suficiente, puede hacerse en inglés.

EURES, la red europea de empleo, es una red que conecta los servicios públicos de empleo de los países de la UE, facilitando la movilidad y colocación de los trabajadores.

En su página web se puede crear un perfil y registrar el curriculum, acceder a ofertas publicadas y consultar detalles sobre las condiciones de vida y de trabajo en toda Europa.

Las personas que tienen entre 18 y 30 años pueden adquirir experiencia en el extranjero a través del Servicio Voluntario Europeo (SVE). Es un programa financiado por la Comisión Europea que permite llevar a cabo una experiencia de voluntariado internacional en una ONG o ente público de Europa, África, Asia o América Latina por un periodo comprendido entre 2 y 12 meses. Aunque no se trata de un trabajo remunerado, el programa proporciona el reembolso del 90% de los gastos del viaje y la cobertura total de los gastos de alojamiento, manutención, transporte, seguro médico, curso de idioma y dinero de bolsillo de los voluntarios.

Además de las bolsas de empleo de grandes compañías, como Randstad o Adecco, en internet existen portales de empleo y recursos para conocer el mercado laboral del destino ideal.

En la embajada o consulado informan de los requisitos para residir y trabajar en el país que representan. Esto es de gran utilidad especialmente si se abandona el espacio comunitario. Si no hay en la isla, siempre tendrán página web. Otra opción es contactar con la embajada española en el país. En sus portales se publican ofertas de empleo para trabajar en la propia Administración Pública de destino. Además, se pueden consultar los requisitos y permisos necesarios para comenzar a trabajar.

Si se conoce gente que ya se ha ido, contactarles permite tener referencias y consejos de primera mano, además de ayudar a buscar todo lo necesario. Si no, puedes recurrir a comunidades de españoles en el mundo como Spaniards.es.

Otra opción son las agencias privadas especializadas en la búsqueda de empleo en el extranjero. Gestionan y organizan ofertas en el extranjero (generalmente de poca cualificación), cursos de idiomas, trabajo combinado con estudios, estancias au pair, prácticas, etc. El inconveniente es que estas empresas cobran por sus servicios.