Miles de personas se manifestaron ayer por el centro de Madrid convocadas por la Plataforma Cada Vida Importa, formada por unas 40 asociaciones antiabortistas, con el lema "Por la vida, la mujer y la maternidad".

Estas entidades representan a cuatro millones de familias, aseguran, y consideran que los políticos "han abandonado" la defensa de la vida, si bien algunos dirigentes asistieron a la marcha como la candidata del PP al Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre; o el exministro del Interior Jaime Mayor Oreja.

Entre las asociaciones antiabortistas convocantes se encontraba el Foro de la Familia, cuyo presidente, Benigno Blanco, aseguró a los medios de comunicación que espera que en España "no caiga un muro de silencio sobre el aborto, que es un inmenso drama social al que no podemos acostumbrarnos".

Blanco se refirió también a la proposición legislativa presentada por el PP en el Congreso para impedir que las menores de 16 y 17 años puedan abortar sin permiso paterno, como único punto de modificación de la actual ley de plazos que regula la interrupción voluntaria del embarazo, aprobada cuando gobernaban los socialistas.