La historia del pequeño Adou, el niño de Costa de Marfíl de ocho años que fue introducido en una maleta para entrar ilegalmente en España el pasado 7 de mayo, escribió ayer un nuevo capítulo tras haber conseguido un permiso temporal para residir en este país durante un año.

Sin enterarse de lo que pasa a su alrededor, de la repercusión mediática que está teniendo su caso tanto a nivel nacional como internacional y quizá preguntándose cuándo podrá ver a sus padres, Adou recibió ayer en el centro de acogida del Mediterráneo una grata noticia.

Según informó a Efe la Delegación del Gobierno, la Secretaría General de Inmigración y Emigración del Ministerio de Empleo ha concedido una autorización individual por el plazo de un año de residencia temporal por circunstancias excepcionales.

La concesión se ha producido como consecuencia de la aplicación del reglamento de la Ley Orgánica 4/2000 de 11 de enero sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social.

Esta notificación oficial fue trasladada ayer a la Oficina de Extranjería de Ceuta que, a su vez, la ha enviado al director del centro de acogida del Mediterráneo donde permanece el menor.

Esta autorización permitirá al niño reunirse con su madre, si bien esta situación no se producirá hasta que las pruebas de ADN que se han practicado tanto al padre como a la madre y que han sido remitidas a un laboratorio especializado en Madrid confirmen que se trata de sus progenitores.

Esta prueba de ADN fue pedida por el Ministerio Fiscal para descartar que se estuviera ante un posible caso de trata de menores.

"Estamos muy contentos porque es un paso más dentro de este proceso en el que estamos encontrando mucho apoyo", comentó el abogado Juan Isidro Fernández.

Asimismo, fuentes gubernativas han dicho a Efe que todavía está pendiente de obtener el Número de Identificación de Extranjeros (NIE), lo cual se producirá en el plazo de unos días.

La madre, Lucie Ouattara, tuvo la oportunidad de visitar al pequeño Adou el pasado lunes, cuando acudió al centro de acogida acompañada por su abogado.

El padre del menor continuará en prisión

La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Ceuta

desestimó ayer la petición de libertad de Alí Ouattara, el padre de Adou, en prisión provisional acusado de intentar ocultar al niño dentro de una maleta para cruzar la frontera del Tarajal. La juez ha adoptado esta decisión después de escuchar al Ministerio Fiscal, según han informado a Efe fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. La decisión judicial se ha producido al entender la juez que instruye el caso que las circunstancias "no han variado" desde el momento en que se acordó la prisión provisional de Alí Ouattara, según las fuentes. La jueza entiende que la prisión se acordó basada en dos hechos fundamentales, la posible existencia de un riesgo de fuga al contar con bienes patrimoniales en el extranjero y la presunta responsabilidad en el "grave peligro" para la vida del menor y su integridad física, delito en el que puede haber incurrido.