Desde que en 2012 la Defensora del Pueblo recomendara a las autonomías asegurar la alimentación de los niños en verano abriendo los comedores escolares, algunas siguen el consejo, pero tras las elecciones del 24 de mayo parece aumentar el número de las que aplicarán esa u otra fórmula.

Si en 2014 solo tres o cuatro regiones mantuvieron abiertos en verano los comedores de los colegios -siguiendo la senda iniciada por Canarias en 2013- y en algunas otras las ayudas salieron de los ayuntamientos, esta vez casi todas han anunciado fórmulas para que los menores tengan una comida completa al día.

En Andalucía, la Junta mantendrá el refuerzo de las comidas para 4.500 menores a través de 60 escuelas de verano.

El Instituto Aragonés de Servicios Sociales dará ayudas de 180 euros a los niños que no tengan acceso al comedor y que hayan estado becado en el curso.

El nuevo gobierno municipal de Oviedo, en Asturias, ha iniciado los trámites para abrir los comedores y, de momento, ha recibido 173 solicitudes.

En Baleares, el Ayuntamiento de Palma ha prometido ampliar en verano las plazas de comedores para facilitar la conciliación familiar y cubrir las necesidades de la población con menos recursos.

El todavía consejero de Educación del Gobierno canario, José Miguel Pérez, ha dicho que unos 5.000 menores participarán en el programa con comidas y clases de inglés, que se amplía a la ESO.

El PSOE, que se ocupará de la Consejería de Educación en Cantabria, ha pedido al Gobierno en funciones que deje abiertos los comedores, aunque el Ejecutivo ha trasladado esta responsabilidad a los ayuntamientos.

La Junta de Castilla y León ha cedido el uso de dos colegios en Valladolid para dar una comida al día a 110 usuarios, con un coste de entre 12.000 y 18.000 euros que pagará el ayuntamiento.

El próximo Gobierno castellanomanchego del socialista Emiliano García-Page dice que tendrá la máxima sensibilidad en esta materia porque es una de las comunidades con menos becas de comedor en la legislatura anterior.

La Generalitat de Cataluña incrementará los centros abiertos en verano para menores en riesgo social, incluyendo dos o tres comidas diarias para una alimentación saludable.

La Comunidad Valenciana ha adelantado que se abrirán los comedores de forma coordinada con ayuntamientos.

Los comedores en Extremadura se incluyen en los llamados Espacios Educativos Saludables, que gestiona en verano la Cruz Roja con una ayuda directa de 880.000 euros del Gobierno extremeño.

Las familias gallegas reciben ayudas del Gobierno y con la participación de la Federación Gallega de Municipios y Provincias.

La apertura de los comedores fuera del horario lectivo ha sido anunciada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y figura en el pacto de Gobierno con Ciudadanos.